La Albarda
Historia y Patrimonio
Poco sabemos de la Historia de La Albarda. Su topónimo podría hacer referencia a la planta del albardín, utilizado como el esparto para la realización de cordeles y algunos elementos domésticos. También figura en ocasiones el topónimo alabarda, sin poder especificar cuál de los dos se acercaría más al original.
Trabajos arqueológicos realizados en esta pedanía llegaron a descubrir restos de decoración geométrica, urnas de baquetón y cerámica de tipo campaniense, restos que vendrían a certificar la posible existencia de asentamientos de población ibera en las inmediaciones de la localidad. Teniendo en cuenta la existencia de poblaciones iberas en los yacimientos de Castillico de las Peñas, Baños de Fortuna, Cabezo del Tío Pío (Archena) y en el Cigarralejo de Mula, los restos de La Albarda podrían responder al paso eventual de tribus íberas, en un medio geográfico que resulta ser un cruce de caminos.
La Historia más documentada de La Albarda comienza en torno a mediados del siglo XIX, momento en el que se asienta una pequeña población de jornaleros en casas cueva construidas en los promontorios de los alrededores del lugar. Estas casas, excavadas en la roca y con añadidos de mampostería, conformarían la primera población de la que se tiene memoria en la localidad.
La vida de los primeros habitantes de la pedanía era una vida sencilla de agricultores, jornaleros que, en muchas ocasiones, tenían su trabajo en las tierras productivas de los municipios de alrededor, Fortuna y Archena. Además de las labores del campo, sus ingresos provenían del trabajo artesano del albardín, realizando cuerdas, y del esparto, fabricando alpargatas o todo tipo de enseres.
Los escasos habitantes de La Albarda dependían de Molina de Segura en asuntos administrativos, pero la cercanía de Archena les hacían desplazarse con frecuencia a esta población, mientras que para las fiestas más populares tenían como referencia a la localidad molinense de Fenazar. Con los años La Albarda apenas varió su sistema de vida, si bien las casas cueva fueron abandonándose progresivamente ante la mejora de la calidad de vida y el incremento demográfico del lugar. Así, en los años 60' del siglo XX pudo ver abierta su escuela unitaria. Con el progresivo avance de su demografía, hoy día la localidad forma parte del entorno agrícola de Molina de Segura y de las áreas residenciales de este amplio municipio.
Naturaleza
La Albarda, situada en pleno Campo de Molina, se encuentra cerca de las sierras de La Espada y de Lúgar. Se trata de un terreno agreste de secano que en los últimos tiempos, gracias a la dotación de aguas del trasvase, ha tenido acceso al agua y ha transformado algunas de sus tierras en regadíos. Así, nos encontramos con un paisaje típico de secano mezclado con terrenos de frondosa vegetación.
El accidente geográfico más destacable es el Morrón de La Albarda, una elevación achatada en medio del Campo de La Albarda.
En cuanto a la vegetación, despuntan los cultivos de nectarinas, melocotones, albaricoques junto a los olivos o granados. Si nos alejamos de las parcelas cultivadas y nos adentramos en los terrenos más abruptos vemos otro paisaje, descubrimos las especies arvenses propias, el esparto, las plantas aromáticas como el romero o el tomillo.
En este paisaje también podemos contemplar alguna casa cueva, casa que aprovecha el sustrato cálcico de lomas y montículos para habilitar un espacio habitable.
Economía
En el paraje de La Albarda el sector económico que predomina, como en sus pedanías vecinas del campo de Molina, es la agricultura.
Todo el Camino de La Albarda está bordeado por huertos de melocotones, nectarinas, albaricoqueros, cítricos, olivos o granados. Como vemos son cultivos de regadío en su mayoría, producciones de gran calidad, algunas de ellas destinadas a la exportación.
Hay otro sector económico al que se ha abierto esta población en los últimos tiempos, es el turismo rural. En La Albarda podemos encontrar dos antiguas casas rurales, "Casa Los Medinas" y "Los Medinas II" ubicadas en los alto de una cerro. La situación geográfica de La Albarda, cerca de núcleos importantes de población como Archena o Fortuna, y cercana también a zonas de gran belleza natural como las sierras de La Pila o de Lúgar, convierten a esta pedanía en un lugar atractivo para el turismo ecológico o el de ocio sin olvidar que por su tranquilidad es también ideal para unas vacaciones de descanso.
Gastronomía
Al ser una población eminentemente agrícola los productos de la tierra están muy presentes en la cocina de La Albarda. Los habitantes de La Albarda conservan las tradiciones culinarias del Campo de Molina.
Siendo una localidad cercana a la sierra los platos de caza están presentes en su cocina. Así son preparadas los conejos y liebre o las aves como las perdices. Y, naturalmente, también se degustan las carnes de los animales de granja, los asados de cordero acompañados con una buena guarnición de patatas, los guisos de cerdo, los estofados.
Se complementan estos alimentos con las legumbres y las hortalizas. No faltan en las mesas de La Albarda el arroz y habichuelas, la olla gitana, las lentejas estofadas o el cocido con pelotas. Los arroces tanto de carne como de verduras tienen un capítulo aparte. Protagonista en las reuniones familiares y preparado, preferentemente, sobre la lumbre de leña el arroz y conejo es el más representativo. No faltan tampoco las migas con magra, tocino, etc.
Y cómo no, entre los dulces, destacar las recetas navideñas de tortas de naranja, tortas de pascua o mantecados de almendra.
Centro Social
En diciembre de 2007 quedaba inaugurado el Centro de Interpretación La Albarda de Ritos y Tradiciones del Campo de Molina, emplazado en la Antigua Escuela Unitaria de la pedanía.
Se trata de un proyecto del Ayuntamiento de Molina de Segura, a través de la Concejalía de Turismo, en colaboración con la Dirección General de Infraestructuras Turísticas, que tiene como fin divulgar los ritos y tradiciones del campo de Molina de Segura, utilizando para ello diversos elementos y técnicas de comunicación modernas, dedicados a estimular los sentidos del visitante para que el aprendizaje sea ameno e incluso divertido.
Sus dos plantas tienen distribuidos los elementos señalados, concentrando en cada una de ellas distintos proyectos. Así y según consta en el propio centro: "En la Planta Baja, a través de formas expositivas didácticas y modernas, se pretende transmitir a los visitantes la diversa riqueza sobre la naturaleza y la vida en el Campo de Molina, a la vez que se difunde el conocimiento que se tiene sobre la intervención del hombre en los recursos del campo y la conservación de sus ecosistemas, facilitando, así, una interpretación del Patrimonio Rural tangible e intangible y la vida, usos y costumbres de sus habitantes". La segunda planta, por su parte, siendo el área de las aulas de la antigua escuela, recrea una antigua aula de escuela rural, exponiendo la evolución de la educación en estas escuelas a través de la exposición de distinto equipamiento, con talleres, proyecciones, etc.
Entre la programación que se efectúa todos los años para este centro destacamos sus diversos talleres, dedicados a la decoración con elementos naturales, los juegos tradicionales, la práctica de antiguas costumbres (realización de jabón artesano, etc) o sesiones para los más jóvenes de cuentacuentos.
El centro está abierto al público los fines de semana y en los días laborales recibe la visita de grupos concertados.
Fiestas
La Albarda no tiene fiestas locales propias, pero sus vecinos no pasan la oportunidad de celebrar las fiestas de Molina de Segura, dedicadas a la Virgen de la Consolación, patrona del municipio.
Las fiestas de Molina, que se extienden durante la primera quincena del mes de septiembre ofrecen cada año una apretada agenda de citas culturales, religiosas, deportivas y festivas, que congregan a molinenses y visitantes en todas las calles, plazas y parques de la localidad.
Entre los actos más queridos por los molinenses destaca el Concierto Virgen de la Consolación, la Ofrenda Floral, el Festival Internacional de Folclore, el Desfile de Carrozas y la romería de la Virgen de la Consolación.
Charangas, grupos de coros y danzas, tunas y bandas de música, comparten calles y plazas, siendo uno de los elementos más destacados de estos días de fiesta.
Por otra parte, lo vecinos de La Albarda, también disfrutan de las pequeñas fiestas de la localidad vecina de El Fenazar, dedicadas a la Virgen de los Ángeles. Durante una semana vecinos de toda Molina pueden disfrutar de los varios actos que honran a la patrona, la Misa Huertana en honor de la Patrona y la Procesión se convierten en los principales eventos de carácter religioso y sus verbenas y novilladas forman parte de los elementos puramente festivos más disfrutados.