El Salero
Historia y Patrimonio
El Salero es una pedanía que actualmente se encuentra en la zona de expansión del entramado urbano de San Pedro del Pinatar. El topónimo haría referencia a su situación cercana a las salinas que se encuentran dentro del Parque Regional de Las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar. Los romanos llegaron a esta zona en el siglo 3 a. C. Publio Cornelio Escipión, asedió 
Qart Hadast batiendo a Aníbal en 209 a. C. y comenzó la hegemonía de Roma en el Mediterráneo. Los vencedores se afianzaron y romanizaron el Campo de Cartagena, al que ellos denominarían "Campus Spartarius". Se tiene constancia de la explotación de estas salinas desde esta época en la que esta zona se convierte en una villa industrial romana. Las salinas fueron explotadas por los romanos para la salazón de pescados y para la elaboración de la salsa Garum, que preparaban macerando las vísceras de los pescados. La presencia de los romanos y su industria de salazones en el municipio está atestiguada por los hallazgos de restos de villas romanas y fustes de columnas en las inmediaciones de San Pedro del Pinatar, y por los hallazgos de balsas de decantación descubiertas gracias a la arqueología subacuática.
Más tarde los musulmanes trajeron a esta zona la pesca a través de encañizadas. En el siglo XIII Alfonso X asume los poderes reales y divide esta zona entre Cartagena y Murcia, el área de El Salero quedó dentro del territorio de Murcia. Más tarde entrega las pesquerías del Reino de Murcia al Infante don Juan Manuel. Sin embargo, las continuas discordias entre ambos, terminaron empujando a Alfonso X a despojar al infante del Adelantamiento de Murcia y de las pesquerías de la Albufera, quedando éstas últimas en manos de la ciudad de Murcia. Alfonso XI cita en el Libro de la Montería que en sus aguas se pescaba el mújol, el atún, la jábega, la alecha, el bonito, el congrio y la sardina. Las salinas, en propiedad de la Corona, eran arrendadas para su explotación. Hasta el siglo XVII estas costas acusaron los ataques beréberes, pero lentamente, la zona se fue repoblando con gentes dedicadas a la pesca y a la explotación de las salinas. En el siglo XIX las gentes de este lugar seguían dedicadas a la pesca, la explotación de las salinas y la agricultura de secano, y lo han seguido estando hasta bien entrado el siglo XX. En los años 70 de este siglo se produce el "boom" turístico del municipio que no ha parado de crecer. El Salero es en el siglo XXI una pequeña entidad poblacional de casas sencillas rodeada de edificios y zonas verdes de nueva construcción a un lado de la carretera que une el Parque Regional con el centro urbano de San Pedro del Pinatar.
Naturaleza
Siendo un área en proceso de urbanización es difícil delimitar un paisaje natural. La mayor parte de las especies vegetales que se encuentran en ella son ornamentales y forman parte del diseño del trazado urbano y de las zonas de parques y jardines. Exceptuando la del cercano Parque Regional de las Salinas y Arenales.
La escasa vegetación silvestre se reduce a ejemplos de esparto, palmeras, chumberas o higueras.
En cuanto a la fauna del lugar queda reducida a numerosas aves y a las especies de pequeños mamíferos y reptiles. De entre las aves típicas debemos destacar, sin embargo, la visita de algunas de las acuáticas que suelen residir en las cercanas salinas, como las cigüeñuelas, las avocetas, las agujas, los chorlitos, las golondrinas de mar o los vistosos flamencos
Fiestas
Los vecinos de El Salero salen a celebrar las fiestas de San Pedro del Pinatar. Las más significativas son las patronales que se celebran en honor de San Pedro
Apóstol. En ellas tiene lugar una extensa gama de actividades. Entre otras podemos nombrar las verbenas de elección y coronación de la Reina y su Corte de Honor, las competiciones deportivas, la quema de fallas, la gala de trovos y el día grande de las fiestas, el 29 de junio, en el que se celebra una Misa Huertana y una procesión por las calles de la localidad.
Otras fiestas a destacar se celebran en julio en honor de Nuestra Sra. La Virgen del Carmen, en la que destacan la Ofrenda a la Patrona, con frutos, flores y productos del Mar.
La Semana Santa constituye otro momento destacado, sobre todo la procesión de Viernes Santo, en la que participan 11 pasos y que se viene celebrando desde 1951, y la del Domingo de Resurrección.
Economía
Siendo prácticamente un barrio más del municipio de San Pedro del Pinatar, su vocación es eminentemente residencial, bien todo el año, o como residencia de veraneo de familiares de antiguos vecinos. El sector de la construcción está muy presente en sus alrededores y ha constituido una fuente de empleo para sus habitantes.
El comercio minorista tiene también una pequeña representación en las tiendas del sector de alimentación o en servicios de taller de mecánica.
Gastronomía
La gastronomía de El Salero basa su esencia en el mar y la sal. Las salazones constituyen un exquisito aperitivo acompañado de almendras fritas. Para ello se utiliza el bonito, la caballa, la melva, la corvina y el atún. Del Mar Menor también se extraen los langostinos que constituyen un plato único. De plato principal un exquisito caldero con alioli o un delicioso pescado a la sal.
El exótico pastel de Cierva, elaborado con una pasta de harina, manteca y azúcar, relleno con carne de ave y huevos duros, es otro de los platos típicos de la zona.
Entre los postres podemos elegir desde las frutas frescas cultivadas aquí mismo hasta uno de sus dulces. Melón, higos o una ración de tocino de cielo son algunos ejemplos.