Este Cerro se alza sobre una  cumbre de la Sierra del Caño. Su  situación estratégica privilegiada como lugar de control del territorio y sus excelentes cualidades geopolíticas favorecieron la existencia de una población en su cima desde la Prehistoria hasta la actualidad.

Controlaba dos importantes vías de comunicación: la que discurría por el interior, que unía la cuenca del Segura con Andalucía Oriental (los Vélez, Baza y Granada), y la de la costa que a través de la Depresión Prelitoral  discurre hacia Huércal-Overa, Vera y Almería.

Las excavaciones realizadas en el Castillo han documentado una amplísima secuencia cronológica que se extiende desde el Calcolítico hasta el siglo XIX; junto con numerosos restos constructivos y materiales cerámicos, los trabajos arqueológicos  han sacado a la luz una sinagoga judía, la única excavada completamente en la península ibérica.