La Puebla de Mula destaca por su abundante patrimonio medieval, testigo mudo de alguno de los episodios más destacados de la Reconquista cristiana del territorio murciano. La utilización de sus cerros, como zonas defensivas, se remonta a la Edad del Bronce. Tanto la cultura ibérica como la romana volverían a utilizar sus relieves naturales como zonas defensivas, muy apropiadas para el establecimiento de poblados. Así, el arte rupestre, los restos ibéricos, romanos y tardorromanos constituyen las huellas históricas más antiguas de esta pedanía. De la etapa de la Antigüedad Tardía, los restos hallados de estelas funerarias y monedas visigodas son los que hacen patente la existencia milenaria de población en estos parajes.

  Si por algo destaca la Historia de La Puebla de Mula es por sus torres vigía medievales, construidas tras la entrada de Alfonso X en el territorio murciano y la paulatina Reconquista del terreno a los musulmanes. Estas torres, dispuestas para dar cobijo a las guarniciones cristianas, son el comienzo del desarrollo urbano de la población. Hoy día aún pueden recorrerse las siete calles, de las que partió el desarrollo del antiguo caserío medieval, teniendo un especial relieve la calle principal que tenía en la Iglesia Parroquial su eje central. Las viejas torres vigía, que llegaron a servir como lugares de culto, aún pueden admirarse en La Puebla, lo que convierte a esta villa en una de las poblaciones murcianas de más entidad patrimonial.