Cañizos cerca de las zonas húmedas [Cehegín_Canara]
Cañizos cerca de las zonas húmedas

La naturaleza de la pedanía de Canara viene marcada por su situación geográfica, enmarcada entre peñas de moderada elevación (alrededor de los 700 metros), las cercanas sierras de la Puerta y de la Lavia, y la fértil vega del río Argos.

Los ecosistemas canarenses muestran peñas y sierras con relativa abundancia de aves rapaces y el río, donde se puede encontrar aún una tímida fauna fluvial compuesta por batracios (sapos y ranas), salamandras, carpas, barbos y cangrejos.

Actualmente, el clima que sufre la zona hace que el río presente un caudal muy escaso, que incluso llega a desaparecer por completo algunos veranos, resultando poco apto para la supervivencia de cierta fauna.

Densidad forestal

Buena parte del tejido forestal de la zona está formado por pinares con distinto porcentaje de cobertura y origen (sobreviven un buen conjunto de formaciones boscosas naturales, mientras que en otras áreas se perciben huellas de repoblación).

En la pedanía de Canara también existen ejemplares centenarios de ciprés y morera, junto con algunas palmeras bien adaptadas a los rigores invernales.

Asimismo, se observa una variada población de matorrales, entre los cuales abundan los romerales y espartizales (los primeros con uso gastronómico o en perfumería, previa extracción de sus aceites esenciales; los segundos, ampliamente utilizados desde antiguo para la confección de calzado y ajuar doméstico). También hay que mencionar las cañas, abundantes en las inmediaciones de Canara, y que según algunas teorías están en el origen del nombre de la pedanía.

Junto a estas variedades conviven otras especies como la coscoja, enebro,  albaida (o boja, según la denominación local),  tomillo, siempreviva, jara, numerosos ejemplares de sabina,  aliaga, rabo de gato, espino negro, lentisco, madroño (con algunos ejemplares de buen tamaño) y carrascal. Una gran parte de estas variedades vegetales está protegida por la legislación autonómica.

Fauna

Las poblaciones de rapaces son relativamente abundantes en las elevaciones montañosas que rodean Canara, donde el porcentaje de poblaciones específicas están entre los más altos de la Región de Murcia. De ese modo, se trata del área con mayor número de parejas de águila calzada establecidas a lo largo de todo su ciclo vital; es decir, no sólo nidifican y se reproducen en la zona sino que también pasan el invierno.

Igualmente, hay de destacar especies como el búho real, búho chico, azor,  gavilán, halcón peregrino, cernícalo común, alcotán,  ratonero común, águila culebrera y, sobresaliendo entre las demás por su impresionante estampa y envergadura de alas, algunas parejas de águila real.

Por último, también se debe reseñar una buena representación de mamíferos terrestres como el tejón (bastante amenazado por la presión humana sobre su hábitat), el gato montés, la gineta (especie igualmente amenazada), el turón, además de especies cinegéticas de caza menor como la perdiz, la codorniz, la tórtola, la liebre, el conejo silvestre y el jabalí, del que se pueden ver revolcaderos en zonas de charcas y que más de una vez ha dado un susto a algún lugareño al acercarse en busca de alimento a huertas y jardines.