En el Plan se puede disfrutar de una rica gastronomía que se nutre del mar, de la huerta y del secano. Se trata de una cocina que ha ido enriqueciéndose con las diferentes culturas que han poblado Cartagena, ibérica, fenicia, púnica, romana, árabe, etc. y que ha dado lugar a unos platos que premian los paladares de quienes tienen la suerte de degustarlos.
En la cocina de la diputación cartagenera se distingue el uso de la carne de corral como aves y conejos, así como también la carne de cordero y todos los productos derivados de la matanza del cerdo. Así, entre las recetas destacan el arroz y conejo, el guiso de cordero y alcaciles o el conejo al ajo cabañil, siempre presentes en las ventas y restaurantes de la zona.
La base de la cocina del campo está, sin embargo, en los productos que se cultivan en la tierra como pimientos, habas, tomates, judías, entre otras. Resulta extraño encontrar una receta que no incluya alimentos como guisantes, tomates, alcachofas o habas, estas últimas, secas, dan lugar a otro plato importantísimo de la gastronomía cartagenera como son los michirones.
Entre los postres destacan los melones, el higo de pala, el Tocino de Cielo y el dulcísimo Arrope.
Estos platos son regados con los Vinos de la Tierra que se producen en el Campo de Cartagena.