Un campo de espárragos trigueros

Casi todas las pedanías murcianas tienen una historia común, ya que la realidad del municipio de Murcia lo convirtió, incluso durante la dominación musulmana, en un territorio escasamente habitado, con una gran ciudad rodeada de un hábitat disperso compuesto por alquerías o pequeños caseríos con cultivos.

Esto último explica el hecho de que no haya una documentación exacta sobre El Esparragal durante la Edad Media, y que no sea hasta el siglo XVI cuando se empiece a poblar y cultivar su terreno. El topónimo es curioso y su origen sólo queda explicado por  la posibilidad de que se dieran numerosos campos de espárragos trigueros en la zona, apreciados ya en el siglo XIV y buscados por los habitantes de la vecina Orihuela.

La Orden de los Jerónimos: primeros propietarios de El Esparragal

Pero la historia escrita de la localidad arranca, sin duda, en el siglo XVI, cuando en 1505 la reina doña Juan la Loca, siguiendo los proyectos repobladores de las monarquías castellanas,  hace el donadío de las tierras que ocuparían el actual Esparragal, así como parte de Santomera y Monteagudo, a don Alonso Vozmediano y Arróniz, fundador de la orden de los Jerónimos de San Pedro de La Ñora.

Este paraje era conocido como La Urdianca o Urdiancas y fue cedido a la Orden de los Jerónimos de La Ñora en 1557, que lo convirtió, paulatinamente, en tierras cultivadas y cedidas en arrendamiento, llegándose a describir como 'un país ameción de obras hidráulicas y la puesta en cultivo de sus tierras, centradas principalmente en la morera, el lino y la manufactura de la seda.

Pedanía murciana y cruce de caminos

no, delicioso y productivo que superaba a otras tierras de la Huerta cultivadas muchos siglos ante'.

Durante la Edad Moderna El Esparragal es un lugar fecundo gracias a la realiza

Vuelve a aparecer la localidad en la historia durante el siglo XIX, cuando conforma un ayuntamiento propio entre los años 1821 y 1823, situación muy repetida en toda la geografía murciana y española que apenas duraría 3 años, tras los cuales se convertiría nuevamente en diputación de Murcia.

Durante le siglo XIX El Esparragal es descrito en el diccionario de Pascual Madoz como lugar poco poblado, de unos mil quinientos habitantes y dedicado a la seda, el trigo, el maíz y las hortalizas, pero considerado también como un importante cruce de caminos.