La pedanía de Sucina se sitúa en lo que tradicionalmente se conoce como “Campo de Murcia”; en la loma central de la finca de la Peraleja en la Sierra de Columbares.
Este tipo de palomar antaño tan frecuente en el campo murciano ha ido desapareciendo paulatinamente siendo bastante difícil encontrarlos.
Aún así es mucho más frecuente ver los palomares levantados en las partes superiores de las casas de campo o independencias anexas a la casa, de ello radica la importancia de este palomar. Se caracteriza por ser una construcción exenta, es decir, se encuentra separado de otras construcciones de la casa, aprovechando una pequeña colina cercana a la vivienda.