Como anécdota, destaca el comentario sobre Julián Romea tras debutar en el Conservatorio: 'Este muchacho que hace 'El Testamento' empieza por donde otros acaban', demostrando así un enorme talento a pesar de que su papel no permitía demasiado lucimiento.

Algunas biografías achacan este comentario al rey Fernando VII, que estuvo presente en la representación, pero lo cierto es que lo firmó Fígaro (seudónimo del periodista Mariano José de Larra), en la crítica teatral aparecida en Revista Española tras el estreno.

El Teatro Romea lleva su nombre como agradecimiento del Ayuntamiento de Murcia por las representaciones ofrecidas por Julián Romea a favor de los damnificados de una gran riada ocurrida en la época.