El Langostino del Mar Menor o Panaeus Kerathurus es un crustáceo de la variedad llamada atigrados que habita los arenales marinos de la mayor laguna salada del Mediterráneo.

     Sus características físicas lo presentan como un ejemplar muy parecido al resto de individuos de su especie, no obstante las condiciones particulares de las aguas del Mar Menor, con sus especiales niveles de salinidad, hacen que el sabor de este crustáceo sea muy valorado en los mercados y mesas de toda España. Además físicamente también difiere de otros ejemplares de su misma especie ya que su tamaño es menor y mayor la intensidad del color de sus franjas atigradas.

Producción

     Hasta el puerto de San Pedro del Pinatar llegan cada año cerca de 3.500 kilogramos de langostino capturado mediante las técnicas de arrastre y nasas que pueden alcanzar en el mercado precios muy elevados.

     La composición del langostino mantiene algunas diferencias particulares con relación a otros crustáceos como las gambas. Son un alimento bajo en calorías y una fuente importante vitamina D, proteínas y minerales.

Gastronomía

     La Región de Murcia cuenta con numerosos platos en los que el langostino combina a la perfección con pescados y verduras típicas de los mares y huertas de la zona, pero la calidad excepcional de estas piezas tan buscadas en lonjas y mercados favorece las recetas sencillas que utilicen únicamente estos ejemplares.

     Es usual encontrarlos cocinados al vapor, hervidos o cocidos y a la plancha, incluso algunos puristas del sabor de este crustáceo elimina añadidos como el limón, tan utilizado en platos marineros en la región.

     De esta forma alguna de las preparaciones que también cuentan con el langostino y que se pueden encontrar en las mesas murcianas son el caldero, arroces o diferentes entrantes.