En la Región de Murcia existen básicamente dos especies de tórtola utilizadas en gastronomía, la Tórtola Común o Streptopelia turtur y la Tórtola Turca o Streptopelia decaoto, ambas pertenecientes a la familia de las Columbidae. Se trata de dos especies diferenciadas por la tonalidad de su plumaje, su tamaño, costumbres y el tiempo que llevan habitando la Región.

    La Tórtola común es una ave migratoria que llega a Europa desde el Norte de África durante las fechas primaverales y estivales para disfrutar así de las estaciones de temperatura suave o calurosa. Su aspecto se asemeja al de la paloma (de la misma familia) aunque su tamaño es algo inferior, ya que puede medir de 24 a 26 cm. En su colorido destaca el pardo claro del dorso (con aspectos grisáceos), zonas inferiores de gris azulado y rosa, alas con plumas coberteras rojizas o marrones con motas negras, cabeza y cuello grises en los machos y amarronados en las hembras, cola negra con ribetes blancos, especie de collar en el cuello con bandas blancas y negras, así como pico y patas rojizos.

    Habita en zonas rurales, con ambientes de labranza, donde también abunda la vegetación arbustiva o arbórea, lugares éstos propicios para la búsqueda de semillas y granos, su principal alimento.

    Forma pequeñas bandadas o grupos y su contacto con el ser humano es prácticamente nulo, ya que se trata de una especie muy desconfiada, que ha sido cazada desde tiempo inmemorial para poblar las mesas de comensales europeos.

    La Tórtola Turca es una especie introducida de forma accidental en Europa desde Asia Menor. Se trata de una ave que no posee el instinto migrador de la Tórtola común, de tamaño similar o algo mayor y con una clara diferenciación en algunas tonalidades de su plumaje.

    Casi la totalidad de su cuerpo esta cubierto de plumas con colores grisáceos (gris-rosado en el pecho y gris-azulado en el abdomen). También posee un collar alrededor de su cuello pero, a diferencia de la Tórtola común, predomina el color negro. Su pico es negruzco y las patas rojizas. En esta especie el colorido del plumaje de ambos sexos es muy similar. Existen además dos variedades de Tórtola Turca diferenciadas por sus tonalidades generales: grisacea y blanca.

    Esta especie habita principalmente en zonas urbanas de la Región de Murcia, de donde ha desplazado los escasos ejemplares de Tórtola común que quedaban. Su adaptación a este tipo de hábitat ha sido tal que, en algunos parques y jardines, se las puede ver comiendo de la mano de los paseantes.

    En la Región, según la orden de Vedas de 11 de junio de 2008, de la Consejería de Desarrollo Sostenible y Ordenación del Territorio sobre períodos hábiles de caza para la temporada 2008/2009, queda establecido que la tórtola común es cazable dentro de las temporadas y cotos regulados para la caza, a más de 1.000 metros de su palomar, sin embargo, la Tórtola Turca no es cazable.

    Reproducción y cría

    La Tórtola común construye su nido en árboles o arbustos de 1 a 5 metros de altura. La puesta tiene lugar entre los meses de mayo y junio, suele ser de dos huevos que son incubados indistintamente por machos y hembras durante 14 días.

    Las crías o pollos son alimentados durante algo más de dos semanas, abandonando el nido rápidamente, incluso antes de poder realizar vuelos.

    Por su parte, la Tórtola Turca pone los huevos entre principios de marzo y finales de octubre, período en el que puede llegar a realizar hasta cuatro puestas. Construye su nido en árboles de amplias copas, así como, en casos excepcionales y fruto de su adaptación al medio urbano, en los muros de viejos edificios     abandonados. La puesta deja dos huevos que incuban macho y hembra durante 14 días. Tras 18 o19 días de vida, los polluelos dejan el nido. Al igual que la Tórtola común, la posibilidad de volar la adquieren algunos días más tarde.

    Cabe añadir que las tórtolas, como ocurre con las palomas, son aves monógamas, fieles a su pareja hasta que una de las dos desaparece o muere.