Detalle de la base de una lombarda [Lombarda]
Detalle de la base de una lombarda
Lombarda cocida y frita con ajos duros [Lombarda]
Lombarda cocida y frita con ajos duros

    El cultivo de lombarda esta vinculado directamente al ámbito mediterráneo desde tiempo inmemorial, ya que se encuentra entre los productos que cultivaban los egipcios hace más de 4.500 años y, hacia el primer milenio a.C, también el pueblo griego. La civilización romana extendería por todo el Mediterráneo sus atributos culinarios y medicinales.

    Debido a su alto contenido en vitaminas, sales minerales y azufre, durante la Alta Edad Media sería considerada como 'el médico de los pobres', incluso utilizándola de cataplasma para conseguir efectos curativos.

    Gastronomía

    La lombarda se comercializa generalmente en fresco, aunque también puede formar parte de encurtidos y alimentos de 4ª gama, combinada con otras verduras u hortalizas (alimentos que reciben tratamientos para añadirlos a lotes de ensaladas lavadas y listas para el consumo).

    Para asegurar que el producto adquirido conserva toda su frescura es necesario que su textura permanezca firme al tacto, que el color de sus hojas exteriores muestre brillantez, así como un aspecto fresco, carente de defectos.

    Una vez en casa, es posible conservarlas durante un periodo de tiempo cercano a las tres semanas, puesto que se trata de una de las verduras que soportan mejor el paso del tiempo. Para ello, se deben introducir en una bolsa perforada, dentro del refrigerador y en el cajón de las verduras.

    En la cocina de la Región de Murcia el sabor ligeramente dulce de la lombarda fresca acompaña a un buen número de ensaladas, junto a otras verduras como lechugas, tomates, zanahorias, cebolla, espárragos, atún en aceite, frutos secos y yogur.

    Una vez cocida, suele ser empleada en caldos y menestras de verduras, así como en guarniciones de segundos platos.