Casa de los Marín Ponce de León

Este edificio, terminado en el año 1630, pertenece a uno de los principales linajes aristocráticos de la ciudad de Lorca y su principal finalidad era la de servir como residencia privada a la familia. Estaba situado en uno de los lugares más destacados de la ciudad, la Calle Corredera, y frente a ella se ubicaba una antigua posada llamada de San Vicente.

Se trata de un edificio de Estilo Renacentista, compuesto por tres plantas y cubierta a dos aguas. En su sencilla fachada, realizada en mampostería, destacan principalmente dos elementos, la portada y la estatua de San Vicente.

La realización de la portada fue encargada en 1627 a los Maestros canteros Vallés, Garzón y Milanés. Está labrada en piedra y compuesta por un vano de acceso al interior flanqueado por dos pilastras adosadas al muro. Estas pilastras se encuentran coronadas por capiteles que asemejan cabezas de elefante muy esquematizadas. Sobre esta puerta, en la segunda planta, se sitúa un gran balcón central realizado en forja. A ambos lados de este balcón se sitúan los escudos familiares. A un lado aparece el escudo de los Marín cuya representación es la figura de una sirena que sobresale entre ondas. A otro lado se sitúa el de los Ponce de León, escudo partido en el que aparecen un león rampante, en el lado izquierdo, y cuatro barras, en el lado derecho.

Esta portada y balcón sirven de eje de simetría, a partir del cual se sitúan otros dos balcones con barandilla realizada en forja. Las ventanas aparecen decoradas con molduras.   

En la esquina de la fachada que da a la Glorieta de San Vicente encontramos una estatua colocada sobre columna. Esta estatua, realizada en el siglo XVII, representa a San Vicente Ferrer y está sustentada por una columna miliaria de época romana.

Este conjunto mide 2,35 metros de altura y está labrado en piedra caliza. Se compone de sobre pedestal, capitel de estilo corintio reformado (con hojas de acanto y flores de tres hojas), e imagen del Santo. En la columna aparece una inscripción de época romana que delata el uso que tuvo en otros tiempos: situada sobre la Vía Heraclea, indicaba la distancia que había entre las ciudades de Lorca y Cartagena. La inscripción en letras latinas ocupa seis líneas y hace referencia al Emperador Augusto: IMP CAESAR DIV / AUGUSTUS CO / FIEY NIC POTE / IMP XIIII PONT II / MAX / XXVII.

Reaprovechada en el siglo XVII, sobre ella se colocó la imagen de San Vicente Ferrer, en recuerdo de las predicaciones que cerca de este lugar acostumbraba realizar, durante el siglo XV, este teólogo dominico. Este hecho es conmemorado por una placa de piedra rojiza situada en la fachada de la casa, cerca de la estatua. En ella se declaran sagrados, por este motivo, el lugar y la columna.

El buen estado de conservación de esta casa la convierte en uno de los edificios que  mejor refleja los gustos arquitectónicos de la aristocracia del momento.