La arqueología de época medieval no solo no se ha ralentizado en estos últimos años sino que ha venido a incorporar algunos de los descubrimientos más espectaculares del panorama regional.

El hallazgo de todo un barrio islámico del siglo XIII (el arrabal de la Arrixaca), en Murcia, con más de 100 viviendas individualizadas y algunos edificio públicos, en el solar de los “jardines de San Esteban” ha sido sin duda el más mediático, y se encuentra actualmente en curso su resolución y puesta en valor mediante un concurso de ideas.

Al mismo tiempo, la continuidad de las intervenciones arqueológicas en solares de centro urbano de la ciudad, han aportado nuevos indicios para la documentación del recinto murado de Mursiya (c/ Cánovas del Castillo, Nicolás Ortega Pagán y Cigarral, entre otras) y de nuevas viviendas ricamente ornamentadas (c/ Jabonerías).

En el entorno de la ciudad de Murcia destacaremos, junto con las excavaciones en el gran conjunto de la Senda de Granada, los descubrimientos de baños y estructuras bajomedievales en el antiguo convento de Santa Catalina del Monte.

Fuera de Murcia hemos de reseñar, por su importancia y amplitud, las intervenciones en Alhama de Murcia, con la excavación del yacimiento del Cerro de las Paleras, que se remonta al periodo emiral, así como la restauración y puesta en valor de su castillo, obras todavía en curso.

Otros centros donde se vienen realizando estos últimos años labores de consolidación y puesta en valor de estructuras conocidas en décadas anteriores se localizan en Siyasa (Cieza) y Yakka (Yecla), con importantes novedades materiales, como la gran ocultación-tesorillo en esta última población islámica, y el hamman de Los Torrejones.

En el campo de Lorca se está desarrollando actualmente un interesante proyecto de investigación arqueológica en el Castillo de Tirieza, en el marco global de un estudio de la ocupación territorial de este espacio fronterizo, dirigido por el profesor de la Universidad de Murcia Jorge A. Eiroa..

Para el final, hemos dejado la ciudad de Lorca, donde el desgraciado terremoto de 2011 ha trastocado momentáneamente los planes de investigación en el cerro del Castillo, y desviado las investigaciones en el mismo, que incluían los espectaculares descubrimientos de la judería y el trazado de las murallas, hacia labores asociadas a la restauración de la Torre del Espolón y de los tramos murarios más afectados por el seísmo.