Talla realizada en madera policromada.

Se trata de la imagen de Cristo atado a la columna en el momento de la flagelación. El cuerpo está desnudo con la excepción del paño de pureza, es un Cristo sosegado, a pesar de la sangre que vemos a lo largo de todo su cuerpo como consecuencia de los azotes que ha recibido.

La cabeza  está inclinada hacia abajo y ligeramente vuelta hacia la izquierda. Es una escultura que puede ser vista desde diferentes puntos, dando la sensación, según donde nos situemos, de que nos mira.

El cuerpo desnudo permite observar la anatomía del mismo y las heridas causadas por el látigo. El paño de pureza, en color verde, contrasta con la clara policromía de las carnaciones. Dicho paño está anudado en el lado izquierdo y destaca por la forma de disponer los pliegues.

Observaciones:

Francisco Sánchez Tapia es imaginero de la segunda mitad del siglo XIX.  De su matrimonio nacieron tres hijos que dieron lugar a la saga de los 'Sánchez Araciel', compuesta por Francisco Sánchez Araciel, Manuel, y Cecilia.

Es de destacar la presencia de esta familia 'Sanchez Araciel' en el mundo del arte de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Muchas de las obras de Francisco Salzillo han sido restauradas por el taller de dicha saga.

Nombre: Cristo atado a la columna

Objeto: Escultura.

Autor: Francisco Sánchez Tapia

Fecha: Siglo XIX

Ubicación: Iglesia de San Juan Evangelista