Free cookie consent management tool by TermsFeed La tradición flamenca del municipio de Murcia y su entorno huertano - Región de Murcia Digital
MURCIAJONDA

La tradición flamenca del municipio de Murcia y su entorno huertano

La tradición flamenca del municipio de Murcia y su entorno huertano

Antiguo tablao El Patio Andaluz, en el Barrio del Carmen
Antiguo tablao El Patio Andaluz, en el Barrio del Carmen
Pedro Fernández Riquelme

©Pedro Fernández Riquelme. 2008

Murcia es la ciudad huertana por antonomasia. Sus pequeñas y familiares explotaciones agrícolas, anejas al casco urbano hasta el punto de confundirse con él,  iban acompañadas por un peculiar folclore, muy parecido al del resto de la Región y sureste español. A medida que ha ido despareciendo la huerta, el folclore asociado a este tipo de vida corría el riesgo de extinguirse. Pero las peñas huertanas, ayudadas generosamente por la administración pública, lo han sabido conservar para las nuevas generaciones: música, trajes, aperos y gastronomía. Las parrandas, las murcianas, las jotas, las malagueñas....han servido de caldo de cultivo para que decenas de artistas se especializaran en el flamenco a partir de este folclore. Así, lo demostraremos. El flamenco de Murcia no ha corrido la misma suerte. Por eso, el arte jondo que un día fue la música mayoritaria en nuestra Región y que tiene un continuo flamenco en toda la Vega Media y Baja del Río Segura, ya sea en la huerta o en la ciudad, ha ido desapareciendo, dejando resquicios que ahora intentamos recuperar y consolidar por medio de nuestras investigaciones.

             Murcia capital también tuvo unos años de esplendor flamenco, que hoy día ha desaparecido casi por completo. Los locales flamencos más importantes de la ciudad de Murcia han sido el Teatro Ortiz, actual Cine Rex, el Murcia Parque y la Plaza de Toros, que desde los años veinte hasta los cincuenta programaban flamenco con asiduidad, siendo el Teatro Ortiz el más arriesgado a la hora de contratar e innovar con los espectáculos, pues allí debutaron en la Región Pepe Marchena o José Cepero en los años 20. Los cantaores de Cartagena como Guerrita, Fanegas o El Niño de Levante actuaron en ellos en plena eclosión de la Ópera Flamenca. Se sabe del ambiente flamenco de varias tabernas de la zona de San Juan y Santa Eulalia, consideradas como una unidad pues son anexos. En la prensa local hay referencias al barrio de San Juan en relación al flamenco: una de ellas a una bodega en la calle Mariano Padilla en el año 19651 , que no era otra que la Taberna de la Ginesa, castizo lugar donde se daban cita cantaores como El Niño del Segura y aficionados cabales, entre ellos, mi abuelo Antonio Fernández Palazón. Pero mucho antes, en 1925, ya se alude a este barrio como 'castizo y flamenco' 2 . También, en los años cuarenta era tradicional celebrar en el Cine Popular de dicho barrio, con motivo de sus fiestas, un gran espectáculo flamenco. Reseñamos el celebrado en junio de 1947. Actuaron Niño de Segura, Niño de la Muralla, Finita Imperio y el guitarrista Eduardo Martínez, alias Joroco. De los cuatro mencionados, tres nacieron en esta zona.

    Finita Imperio es el nombre artístico de Josefa Cánovas Hoyos. Nacida en Cartagena en 1929, se consagró en Barcelona y Valencia con sólo 16 años. Grabó sus discos en los célebres sellos Columbia, Emi y La Voz de su Amo, algunos junto a Concha Piquer, Lola Flores, Rafael Farina, Marifé de Triana, Imperio Argentina y Pepe Blanco. Pero no solo grabó copla, también impresionó flamenco como serranas, alegrías, fandangos, bulerías, farruca y granaínas, siempre acompañada por su marido, el tocaor murciano Eduardo Martínez Alfonso, alias Joroco, hijo del célebre charlatán 'El Tío de los Lagartos'. Este tocaor, que nació en la Puerta de Orihuela, sita en el barrio de San Juan, estuvo vinculado a la casa Odeón y acompañó a Antonio Molina, El Principe Gitano, Pepe Córdoba y Pepe Baldó, entre otros. Fue un excepcional tocaor y grabó en vinilo. Falleció en los años ochenta. Ambos contrajeron matrimonio en la murciana parroquia de San Lorenzo en 1947. Finita ya poseía, a finales de los años cuarenta, su propio espectáculo, denominado Sol Español, junto al Niño de Carthago, Niño de Segura e Isabel Díaz 'La Levantina'. Actuaron por Sudamérica y Europa, consiguiendo grandes triunfos. En el año 2006 fue homenajeada por el Aula de flamenco de la Universidad de Murcia.

Como hemos comentado, los castizos barrios de San Juan y Santa Eulalia fueron el más ardiente foco de flamenco de la capital; a los artistas ya mencionados como Niño de Segura, Joroco o Niño de la Muralla se unen las inevitables tabernas de ambiente torero y flamenco: el Garrampón, el Jesuso (aún hoy abiertas pero desligadas del flamenco) y la Taberna de la Ginesa.

Ese ambiente y sabor flamencos era también aderezado por las familias gitanas instaladas en los edificios de El Castillejo, junto al Cine Popular.

Algo hay de flamenco en los textos antiguos sobre de la barriada de la Paja en el Barrio del Carmen, habitada por gitanos y bohemios 3 . En este mismo barrio era frecuente que, con motivo de sus fiestas de julio, se celebraran galas flamencas en el Jardín de Floridablanca, hoy perdidas (incluso llegó a bailar la hija de Chilares). A principios de los años noventa del siglo XX, la familia Andreu, de gran tradición flamenca en El Carmen, abrió el tablao Patio Andaluz, que cerró a los pocos años. El hijo varón menor de los Andreu, David, conocido como Morao del Carmen, ganó en el año 2006 el premio Murciajoven al mejor músico en su categoría musical. Se define como cantautor flamenco y compone música que oscila entre el pop y el flamenco. Su éxito es enorme entre el público joven.

En 2005 abrió en la Plaza Captesa, en pleno centro de Murcia, el tablao El Duende que no duró siquiera un año. Hoy día en la capital murciana solo quedan dos lugares donde uno puede sentirse flamenco por unos instantes. Uno de ellos es el bar Parlamento Andaluz, frente al Teatro Romea y regentado por nuestro amigo José María. Aquí se escucha buen flamenco cuando José no tiene el local lleno. Su padre, fundador del establecimiento, es natural de Ronda (Málaga). El otro local es el Bar El Melero en la pedanía de El Esparragal, donde se respira flamenco por los cuatro costados. Aquí suelen juntarse cantaores como El Puri, Pedro Peñalver y Antonio Ferrer El Camionero cuando su delicado estado de salud se lo permite.

Pero El Carmen dio a un célebre cantaor. Desde que tenemos constancia del Nene de las Balsas, gracias a las investigaciones de José Gelardo, decidimos escudriñar todos los elementos relativos al flamenco en el municipio de Murcia y en los pueblos aledaños. El feliz hallazgo de Gelardo nos ha dado pie para profundizar en la figura de este misterioso artista.

José María Celdrán Ibernón, El Nene de las Balsas, (1869-1907) es clave en la interpretación de los cantes mineros, pues nace en Murcia, en el Barrio del Carmen, y no en Cartagena ni La Unión, y en la temprana fecha de 1869. Además, dominaba los enigmáticos cantes de madrugá y variados tipos de malagueñas, entre otros estilos flamencos, pudiendo ser discípulo del gran Rojo El Alpargatero. Su temprana muerte en Bullas a causa de una pleuroneumonía, sesgó la vida a un artista importante en la génesis de los cantes mineros, pues conocía el folclore y era reconocido como intérprete flamenco.

En 1895 descubrimos una importante noticia. Los señores Verdú, que eran dueños de una tienda de música y pianos en la Plaza de Santo Domingo de Murcia, recogen en un fonógrafo las malagueñas del Nene de las Balsas5 . Si se encuentra esta grabación estaríamos ante un descubrimiento vital para esclarecer parte de las génesis de los cantes mineros.

Nuestro cantaor se casó en la Parroquia de Nuestra Señora de El Carmen con Encarnación Fernández en noviembre de 19066 . Solo unos meses después fallecería en Bullas. Una gran tragedia.

   De nuevo, Gelardo  hace mención a dos cantaores murcianos afincados en Madrid en 1892: Pedro Jiménez, del barrio de San Juan, y Víctor Fernández, del barrio de San Benito (actual Barrio del Carmen). Sí hay referencias de cafés-cantantes en el centro de Murcia y en el Barrio de El Carmen , así como actuaciones flamencas en el Barrio de San Juan-Santa Eulalia. Como hemos dicho este fue el barrio más flamenco junto con El Carmen, antaño ambos castizos y hoy cosmopolitas.

 En el año 1925, actúan El Guerrita y algunos miembros de su generación, como Pedro Garrido 'Niño de Levante', Fanegas, El Cano, El Rampa y otros cantaores de la tierra como Paquillo 'El Sombrerero', de la pedanía de Torreagüera, en el concurso de Cante Jondo celebrado en Murcia con motivo de las Fiestas de Primavera. En ese mismo mes de abril, se celebra una gala flamenca en el Cine Salón de Alcantarilla. Al cante 'el célebre cantador hijo de este pueblo', cita la prensa, El Niño de la Vega7  (Francisco Chumillas), que interpretó fandanguillos, taranta, cartageneras, seguiriyas, martinete y bulerías. Se destaca en la prensa que este cantador interpreta desde el polo o la caña hasta la malagueña. Este artista nos aparece más tarde en la prensa en un concurso local de Cante Jondo organizado por el Club Taurino de Murcia en septiembre de 1927 junto a los otros tres finalistas: Francisco Gallardo, Mateo Vidal y el Niño del Pez, acompañados todos a la guitarra por Blas Hernández. Le perdemos la pista en febrero de 1927 cuando es detenido por la Guardia Civil en Cantoria (Almería) por haber robado una bicicleta para disputar la carrera ciclista de Lorca a Granada. Desconocemos la calidad de este cantaor, pero es poco frecuente por estas latitudes, y más en esa época, que un cantaor dominara cantes bajoanadaluces como la seguiriya o el martinete, por eso es un artista más importante de lo que parece. Su lugar de nacimiento, Alcantarilla, es una localidad llena de flamenco, pues ha dado tres artistas de gran interés, como veremos.

  En  septiembre de 19288 , de nuevo se celebra en el Club Taurino una gala flamenca; al cante Pepe Balaguer y José Alcaraz 'Murcianito'; al toque el 'profesor' José Martínez Pituit. Este tocaor nos aparece en varias ocasiones bajo distinto nombre: José Pituiti o José Pituite, confusión provocada por su peculiar apellido. Poco más sabemos de este 'Murcianito', pero seguimos investigando.

Habrán observado el peculiar alias de un cantaor conocido como El Niño de la Muralla. No sabemos a qué se debe, solo conocemos que este cantaor y tocaor vivía entre los barrios de San Juan y Santa Eulalia. Pero no solo actuaba en fiestas de barrio (como en las fiestas de Santa Eulalia en 1954 junto a El Niño del Segura), llegó a actuar junto a Pepe Marchena y Cepero a beneficio de las Milicias Populares en septiembre de 1936, en plena Guerra Civil. En esa ocasión, este peculiar personaje le dedicó una de sus coplas a La Pasionaria. Más tarde, en septiembre de 1958, lo encontramos tocando en un fin de fiesta en la terraza del Moderno, en La Unión, junto al cantaor Francisco Correas. Su última aparición nos aparece en enero de 1959 acompañando a la cantaora local Isi López en Canteras (Cartagena), junto a Antonio Piñana hijo.

Además, tenemos decenas de vagas referencias de cantaores aficionados en los rincones más insospechados de la Vega del Segura:

Aparece en el diario La Verdad el 7 de junio de 1949 José Sánchez Hernández, Niño de Espinardo. En esta misma pedanía, hubo un famoso barbero, conocido como Bonifa, que en el año 1925  adquirió un gramófono donde ponía flamenco a todas horas. Su favorito era El Cojo de Málaga.

Incluso los mismos corresponsales locales se sorprenden de que en la zona haya cantaores, como, por ejemplo, en Blanca:

'Función teatral en beneficio de la capilla del asilo': 'Hizo su aparición una ignorada artista, diminuta, de extraordinario brillo, una 'cantaora' de flamenco proveniente de nuestro suburbio de Los Casones: Juanita Torrano. Su exquisita voz y su excelente entonación y su soltura y dominio de las tablas, determinaron el que el numeroso público se le entregara sin condiciones' .

 Desde entonces, habrá que esperar a los años cuarenta, cuando emerge el Niño del Segura. José Lucas López nació en el barrio de Santa Eulalia en diciembre de 1932. Sus iconos fueron siempre Manolo Caracol, Pepe Marchena y Pepe Pinto, sobre todo este último, del que José Lucas dominaba todo el repertorio. Perteneció durante esos años al elenco de Finita Imperio en el espectáculo denominado 'Sol Español', junto al Niño de Carthago e Isabel Díaz 'La Levantina'. Él era el primer cantaor e interpretaba junto a la Imperio 'La Salvaora' y 'La Niña de Fuego.

 En los años sesenta encontramos esta semblanza:

Calasparra. 'Brillante actuación del gran actor y 'cantaor' de flamenco José Lucas López 'Niño de Segura' que se diferencia de los interpretes de la canción flamenca, en la forma personal y honda que interpreta el cante 'jondo'. Su forma de cantar nos recuerda a los mejores tiempos de las grandes figuras, dominando todos con singular perfección todos los estilos'.9

En el año 1962 pasa a la final del Festival del Cante de las Minas con una murciana. Ganaría premios menores en el Festival del Cante de las Minas en sus primeras ediciones y seguiría actuando por toda la Región de Murcia. La última noticia que tenemos de él se produjo en septiembre de 1972 en un certamen flamenco en Mula, junto a Antonio Ferrer 'El Camionero'. Falleció en Valencia el 1 de febrero de 1999, a la edad de 66 años.

Otro destacado intérprete fue El Camionero. Aunque natural de Orihuela (Alicante, frontera con Murcia), ha vivido en Murcia más de treinta años en la localidad de El Raal, de hecho era conocido como el 'Camionero de El Raal'. En nuestra Región ha desarrollado siempre su arte. Amigo, entre otros, de Rafael Farina, Fosforito o Juan Valderrama, fue Lámpara Minera en La Unión por dos veces (1977 y 1981) y premio Melón de Oro y es una de las voces más hermosas en la historia del flamenco levantino. La vinculación a la profesión que le da el sobrenombre y motivos familiares le impidieron desarrollar una carrera al lado de los más grandes. Llegó a impresionar una serie de cantes editados por la peña Melón de Oro, donde demuestra su amplio dominio del repertorio flamenco: tarantas, peteneras, jaberas, malagueñas, etc. Actualmente, su delicado estado de salud le impide cantar en público, pero ocasionalmente improvisa sus cantecitos en el bar El Melero ante sus amigos. Recibió un merecido homenaje en la Peña Melón de Oro en el año 2005, donde actuaron, entre otros, El Puri, Pedro Peñalver y El Melero.

En los años sesenta, con motivo del nacimiento del Festival del Cante de las Minas, aparecen cantaores en cualquier rincón de la Región, pero pocos datos tenemos de ellos. Además del citado Niño de Segura, nombraremos otros de los que poseemos algún dato y que eran del entorno de Murcia: Rosendo Bautista de Murcia, concursante en el Festival del Cante de las Minas en 1965, y José Antonio Parra, ganador del concurso de flamenco celebrado con motivo de las fiestas de Patiño.  En la edición del Festival del Cante de las Minas del año 1967, encontramos un buen puñado de cantaores adscritos al municipio de Murcia: José Aguilar (Monteagudo), José Vidal, Juan Sánchez Baños, José Sánchez Bañón y Francisco González Palomo 'Niño Vélez' (Murcia), José Vidal Molina y José Aguilar (Santiago y Zaraiche).

Algo más sabemos de Manuel Lax Morales. Nacido el 13 de Diciembre de 1938. Residente en la pedanía murciana de Santa Cruz y de profesión agricultor. De voz dulce, sus cantaores favoritos son Angelillo y Juan Varea. Cultivó los fandangos, granaínas y bulerías, entre otros. Ganó varios premios en festivales flamencos locales como en Murcia (1961), Beniaján, etc. y participó en la primera edición del Festival del Cante de las Minas.

Los concursos flamencos han sido una constante durante todo el siglo XX en la el municipio Murcia, en especial desde el nacimiento del festival unionense: en Patiño, Molina de Segura, Murcia (barrios del Carmen y de San Andrés), Santiago y Zaraiche, etc. No había en los años sesenta verbena popular que no tuviese actuaciones flamencas; las hemos descubierto en todas las comarcas de la Región de Murcia: Lorca, Noroeste, Cartagena, etc.

Es realmente en los años noventa cuando hay una generación destacable de cantaores en la huerta de Murcia, los que dejaron atrás a Marchena o Farina y crecieron con Fosforito. El más importante es Bastián, de Alcantarilla. Su calidad le llevó a ganar un premio por bulerías (2000) y otro por tarantos (2001) en el Festival del Cante de las Minas de La Unión. Hoy día es el cantaor más solicitado para acompañar al baile y se encuentra plenamente en activo.

Pedro Peñalver Noguera, conocido como El Trabuco, nace en 1947 en Sangonera La Verde, Murcia Fue cantaor habitual de la peña flamenca de Puente-Genil (Córdoba) cuando, por motivos laborales, tuvo que residir en aquella zona. Además, en la Región ha frecuentado las peñas de Lorca, Murcia y Lo Ferro. Fue gran finalista de la reñida final del Festival de Lo Ferro de 1991 que se adjudicó finalmente El Rampa.

Francisco Sánchez Ruiz, más conocido en el entorno flamenco como Paquito Sánchez, es un cantaor nacido en la localidad murciana de Molina de Segura en 1982. Actualmente está suponiendo un auténtico 'Boom' entre los aficionados por su manera de ser y cantar, un auténtico 'hombre-espectáculo' metido al flamenco más puro. Desde niño ha sido aficionado a la copla y a la música con aires aflamencados, pero su amor por el flamenco puro y jondo le vino a finales de los noventa cuando visitó Utrera (pueblo sevillano situado en el centro del famoso triángulo del flamenco) y conoció personalmente a  los grandes mitos del flamenco Fernanda (recientemente fallecida) y Bernarda de Utrera. Utrera, Bernarda y Paquito Sánchez actuaron juntos, con otros artistas, en una de las casetas privadas. Ellas han sido la fuente de aprendizaje e inspiración del sentir flamenco del joven cantaor molinense

            Paquito destaca por poseer un compás tremendo, delirante incluso, impropio de los cantaores de esta tierra: tangos, canción por bulerías, alegrías y bulerías, plenas de velocidad, duende y homenajes a las hermanas Bernarda y Fernanda de Utrera. Hace bien la malagueña el Mellizo y se defiende con la soleá para el baile, recorriendo Utrera y Alcalá. Grabó estos cantes en directo en 2007, además, de la famosa colombiana del pajarillo marismeño y unas sevillanas.

En cuanto al toque, conocemos al Mome, de La Alberca, que solía acompañar al mítico cantaor almeriense Chilares a finales del siglo XIX; al cantaor y tocaor el Niño de la Muralla; a Eduardo Martínez Alfonso, alias Joroco. Actualmente tenemos a Faustino Fernández (1979), de Alcantarilla y a José Manuel Fernández, de Molina de Segura.

    

En el baile, de las dos grandes compañías de baile flamenco que tiene la Región de Murcia (La Compañía Murciana de Danza y El Ballet Español de Murcia) y de las famosas academias que imparten flamenco, lo más oportuno es reflejar los bailaores que, nacidos en el entorno de la ciudad de Murcia, están luchando por abrirse camino en este difícil mundo de flamenco y para más INRI, desde Murcia.

           Destaca Cynthia Cano. Nacida el 12 de diciembre de 1993 y natural de Las Torres de Cotillas, provincia de Murcia. Comenzó en el arte del baile flamenco a los dos años. En el año 2005 recibió clases de su ídolo, El Güito, en Madrid. Ha actuado con éxito en la Feria Mundial de Flamenco de Sevilla, en la Peña La Platería de Granada, en el Hospital de Santiago de Úbeda y en el Teatro Romea de Murcia, entre otros. Su premio más importante hasta la fecha ha sido el ¿Veo-Veo¿ 2004. En septiembre del año 2006, representó al flamenco en el Congreso de Países No Alineados en La Habana, Cuba. En la final del Festival de Lo Ferro del año 2007 ha compartido la gala final con El Güito. Cynthia, que declara llevar el flamenco en la sangre, es el máximo exponente de inspiración, gracia y temperamento flamencos, pues a su corta edad ya demuestra tener una intuición insólita para expresarse con las formas del arte jondo. Su crecimiento es imparable, y ya es una de las revelaciones del baile flamenco a nivel nacional.

Ana Belén Ruiz nació el 26 de julio de 1985 en Alguazas, provincia de Murcia, y se metió en el mundo del flamenco desde bien niña. Su mayor ilusión desde siempre ha sido subirse a un escenario y recibir el calor del público. Ha trabajado con diferentes profesores como Puri López, José Luis Navarro, Nuria Aparicio, etc... También ha hecho cursillos con maestros y maestras de la talla de Milagros Menjíbar, Matilde Coral, Belén Maya, Isabel Quintero, Javier  Latorre, Rafael Campallo...Ha bailado en escenarios de Inglaterra, Portugal, Madrid, Sevilla y, sobre todo, en Murcia, pero el más importante para ella es el de La Unión, siendo la única finalista murciana del Cante de Las Minas con 16 años. En la actualidad, está acabando su carrera de danza en el Conservatorio Profesional de Danza en Murcia y forma parte del cuadro del bailaor Daniel Valera. Su interpretación es sobria y racial, marcando sus pasos con gran seguridad y firmeza.

Las peñas flamencas son un fenómeno relativamente reciente. La primera fue la Peña La Platería de Granada. En Murcia habrá que esperar a los años setenta para que surja la primera, llamada Peña Flamenca de Murcia, de carácter eminentemente privado. No han tenido nunca un local propio y han estado en varios lugares como el Hotel Conde de Floridablanca y el Club de Tenis. Esta peña celebró un curioso concurso para aficionados en junio de 1975 en la discoteca La Carroza, donde participaron Miguel Caparrós, Rosendo José Bautista, Rafael Santiago y Ginés Candela, entre otros. En los barrios de La Paz y la Fama, donde reside una amplia comunidad gitana, sabemos de la existencia de peñas flamencas registradas en el listado de la Comunidad Autónoma, pero ignoramos sus actividades. En las pedanías han existido peñas de aficionados espontáneas, sin registrar, como en El Esparragal o en Aljucer; las registradas han sido en Santiago y Zaraiche (Peña Rafael Farina) y en La Albatalía (Peña Niño de Elche). En la capital, la Universidad ha jugado un importante papel en la difusión del flamenco. El Aula de Flamenco de la UMU ha fomentado la publicación de libros y la existencia de la Asociación Flamenca de la UMU. El aula ha estado presidida en su última etapa por Antonio Parra y José Martínez y recientemente ha fenecido. La Asociación ha organizado cursos de flamenco, tanto a nivel teórico como práctico, y actuaciones de los más diversos intérpretes. Hoy día funciona a ritmo muy lento.

En el año 2006 se constituyó la Peña Flamenca de Sucina, sita en dicha pedanía, con ansias de estar a la vanguardia en el nivel peñístico de la Región de Murcia. Con una programación regular y seria, con un grupo de ilusionados socios, con valentía a la hora de afrontar los proyectos y con una gestión democrática, se ha colocado, en apenas un año, al frente de las peñas de Murcia, haciéndonos olvidar, por un momento, la triste realidad de este colectivo en nuestra Región. Francisco Avilés Buendía y compañía han conseguido dar un impulso importante al flamenco en nuestro municipio. En su corta vida han desfilado artistas de la talla de Mejías Portero, Miguel de Tena o Rocío Segura y han organizado con gran éxito de público y amplia repercusión mediática, el primer festival 'De Flamenco Va', que se vieron reafirmad0s con la segunda edición en 2008.

CITAS:


1- La Verdad. 18-6-1965. P.5.

2-El Liberal. 17-6-1925. P.1.

3-Diario de Murcia. 1-9-1895. P.4

4-El Liberal. 17-11-1906. P.3.

5-El Liberal 23-4-1925. P.2

6-El Liberal. 12-9-1928. P.4

7-El Liberal. 30-8-1925.P.4.

8-La Verdad 13-2-1964. P.11.

9-La Verdad, 18-5-1962 .P.9.