Los organizadores del campeonato confiaban en la participación de entre cuatro y ocho clubes, pero la mayoría de los equipos llamados a competir no formalizaron su inscripción. Son los casos del Lucentum de Alicante, el Sport de Cartagena o el Lorca. Asimismo, ningún club valenciano o almeriense mostró interés en participar.

El motivo de la mayoría de estas renuncias obedece a que varios artículos de las bases del campeonato que había redactado la Junta Directiva del Murcia Foot Ball Club beneficiaban claramente a los organizadores. El más polémico de todos fue el artículo séptimo en el que se prohibía a los participantes alinear a más de un futbolista extranjero. El Murcia no contaba con ningún jugador foráneo en sus filas, mientras que sus potenciales rivales, casi todos ellos representantes de ciudades costeras, tenían en sus plantillas varios futbolistas ingleses que, además, destacaban sobre sus compañeros.

El artículo séptimo no fue la única causa que limitó el número de participantes, ya que el Murcia Foot Ball Club vetó la participación del otro equipo que existía en la ciudad, el Sporting de Murcia, al introducir en las bases otro artículo en el que se estipulaba que ninguna localidad podía inscribir a más de un equipo.

El Deportivo Aguileño

Los únicos clubes que formalizaron su inscripción fueron el Murcia Foot Ball Club y el Deportivo Aguileño. Este último era el mejor club de fútbol de la región, pues entre 1900 y 1910 en sus dos denominaciones (Águilas Sporting Club y Deportivo Aguileño) había disputado 26 partidos contra varios conjuntos de la región y de equipos de marineros ingleses y los había ganado todos sin encajar ni un solo gol. Por tanto su superioridad sobre el Murcia Foot Ball Club parecía incontestable.

Sin embargo, la realidad era otra, ya que la mayoría de los futbolistas que habían contribuido a lograr ese record histórico ya se habían retirado. El Deportivo Aguileño había estado tres años sin jugar un partido de fútbol porque no encontró a ningún rival que estuviera dispuesto a enfrentarse a ellos entre 1907 y finales de 1910. De modo que varios de los jugadores con los que contaba para competir en este torneo eran muy inexpertos. 

Una vez confirmada la participación del Murcia Foot Ball Club y el Deportivo Aguileño, los organizadores fijaron el domingo, día 5 de noviembre como fecha para la disputa del partido que habría de decidir cual era el primer campeón de la Región de Murcia.