Ilustración de un guerrero ibérico
Ilustración de un guerrero ibérico

     La arqueología viene aportando en estos últimos años en Cartagena una serie de materiales arqueológicos, que evidencian dentro del perímetro urbano la existencia de un asentamiento anterior a la fundación púnica, que pone de manifiesto una clara coetaneidad entre varios establecimientos costeros de esta zona y, más en concreto, con el poblamiento excavado en Los Nietos a orillas del Mar Menor.

     Estos escasos materiales prebárquidos en Cartagena datables en los últimos decenios del siglo V a. C. y en el siglo IV a.C.  muestran un hábitat generalizado que, sin duda, pudo ser determinante a la hora de fijar solidamente las bases de una futura fundación púnica y que demuestran que la fundación de Qart Hadash (Cartagena) por parte de Asdrúbal no se realizó sobre un terreno despoblado.

     Incluso algunos investigadores sostienen que el propio topónimo ("Ciudad Nueva") podría estar señalando la. existencia de una ciudad antigua sobre la que se habría superpuesto la ciudad destinada a ser la capital púnica de la Península Ibérica. Sobre este posible antiguo asentamiento se tiene al día de hoy poca información, aunque se vislumbra un paisaje en el que las cumbres y laderas altas de las colinas debían estar ocupadas, con un posible asentamiento principal en el Cerro de la Concepción, o mejor quizás en el del Molinete, cuya topografía parece más adecuada y en donde, además, se ha estudiado el más importante conjunto de cerámicas ibéricas fechables a partir del s. IV a.C. También hay que destacar los hallazgos realizados en el Monte San José, como la copa ática de tipo B de pie alto y especialmente una serie de construcciones amortizadas por la muralla cartaginesa.