En cuanto al abastecimiento, al parecer escaseó en la ciudad. En primer lugar decir que se produjo la celebración del mercado el jueves 17 de julio, aunque parece que hubo una escasa concurrencia de público, no volviéndose a mencionar la celebración de otro mercado durante el resto de la experiencia cantonal murciana. Esto parece dejar claro que el abastecimiento escaseó, teniendo en cuenta la especial ausencia en este mercado de gentes venidas de la huerta, que es precisamente la población que traía alimentos desde las zonas agrícolas para venderla en el mercado semanal de los jueves celebrado en la Plaza de Santo Domingo hasta bien entrado el siglo XX.

Otras noticias indican el escaseo de la carne en los medios habituales de abastecimiento en la ciudad, aunque tampoco se puede hablar de un desabastecimiento absoluto y crítico desde el punto de vista alimenticio, ya que existen noticias de la presencia de un profesor de veterinaria que reconocía a las reses, presenciaba los sacrificios y visitaba la plaza para el reconocimiento de las tablas de carne, pescados, frutas y otros comestibles.

Otras noticias hablan de la falta de papel como indica las quejas del diario El Noticiero sobre el timbrado del papel de periódico, o de un único abastecimiento para la ciudad de tabaco en todo el mes. Por lo que el 6 de agosto se denuncia la precaria situación en que se encuentra el establecimiento donde se vendía el periódico La Paz de Murcia, desabastecido de este mismo tabaco. También se cita la escasez de sellos de correos el 3 de agosto.

En definitiva, la situación provocada por la adhesión al movimiento cantonal provocó un ambiente enrarecido y una serie de problemas en las comunicaciones, ya abordadas anteriormente, que pudieron provocar cierto desabastecimiento de la ciudad. Pero sin duda este no alcanzó cotas críticas.

Esta conclusión queda bien indicada en circunstancias como que el abastecimiento alimentario, básico para la ciudadanía, apenas se vio afectado por cierta escasez de carne, que no ausencia, sin tenerse noticias sobre deficiencias en otros productos básicos como el cereal, el vino o el pescado. Únicamente encontramos situaciones deficitarias en productos que realmente no afectaban en gran medida a la vida de la ciudad, como por ejemplo el papel, los sellos o el tabaco. Aunque esto será muy destacado por el diario La Paz de Murcia o El Noticiero de Murcia debido a lo esenciales que eran estos productos para estas publicaciones periódicas, así como para los establecimientos donde se dispensaban.