Tomás Maestre Pérez (1857-1936)

Dentro de la historia de Murcia y de las personas insignes que han dejado su huella a través de sus vocaciones o profesiones, también hay no oriundos de la Región que son recordados a través de escuelas, edificios, plazas o jardines, en un intento por perpetuar la memoria agradecida del pueblo que los acogió y en el que desarrollaron su labor. Este es el caso del doctor Tomás Maestre.

Su trabajo en Murcia, tuvo momentos tan destacados como su labor durante la epidemia de cólera de 1885 que castigó duramente a la Región y que el doctor afrontó con unas innovadoras inyecciones hipodérmicas que consiguieron atajar la pandemia.

El doctor Maestre disfrutó en Madrid de una carrera especializada en la medicina forense, interviniendo en numerosos casos legales en los que su labor y consejo fueron determinantes incluso en la conmutación de penas capitales. Sin duda, su trabajo supuso todo un aporte a la medicina legal de nuestro país, tanto desde el punto de vista científico como en el humano.