La presencia humana en el término municipal de Molina vino a iniciarse en la pedanía de El Fenazar y sus alrededores. Por lo quebrado del terreno venia a ser lugar apropiado para refugio de grupos nómadas. Así podemos reseñar la presencia ibérica en La Albarda, según muestran algunos fragmentos cerámicos encontrados.

No debemos olvidar que por aquel entonces, al igual que ahora, se consideraban muy curativas las aguas de los Baños de Fortuna, Archena y Mula; y eran centro importantes de estadía: Peñas de Fortuna, Cabecico del Tío Pío de Archena y el Cigarralejo de Mula; asimismo la presencia y abundancia de las no menos salutíferas plantas medicinales, en las laderas de la Sierra de la Pila, Espada, Lugar y otras, hizo que para alcanzar uno y otro beneficio, apareciera Fenazar, lugar de la primitiva ubicación.

El núcleo central y antiguo del Fenazar ha sido la llamada Hoya con la presencia humana más antigua. Ya en el siglo III a.C. o sea, hace 2.300 años, unos descuidados viajeros perdieron algunas monedas de procedencia cartaginesa.

Hasta mediados del siglo XVIII, no encontramos referencia al lugar. Entonces al nombrar el Consejo molinense, los cargos y puestos oficiales la citaban: para Diputado de Ortichuela, Fenaxares, Campotéjar y demas que hay desde el término de Villanueba hasta el de Murcia.

Pero a mitad del siglo pasado se fueron construyendo edificios en los alrededores de la iglesia en cuya plaza modernizada recientemente, se celebran las fiestas y los acontecimientos locales, como el día del agricultor, centrando la vida de la pedanía ante la iglesia.

Hay dificultad de encontrar el origen de la palabra Fenazar en alguno de los idiomas que se hablaron por estos alrededores. Nada dicen los filólogos que buscan orígenes latinos o arábigos, dejándonos en la suposición de poder ser modificación de algún nombre musulmán como ben Azar, ben Hassan, ben Altall, que el vulgo y el uso derivo en el siglo XVII hacia Fenaxares y en el XIX, el Fenazar. Aún así, puede considerarse derivado de fenares como la forma más antigua de henares o lugar de heno. O bien de henna, árbol de origen árabe de reconocidas virtudes naturales que servía para: tinturas amarillo-naranja, para la curación de úlceras, como perfume, astringente o afrodisíaco. Y aún como derivado del catalán o valenciano fenas: heno silvestre. En ello están los caminos. Y el principal el que va de Alicante a Archena, trazado por contestanos y batistanos anteriores a Roma, pasando por Fortuna y el Fenazar. Todavía perduran las denominaciones de camino viejo de Orihuela y camino viejo de Archena.

Don Juan Manuel en el siglo XIV, hizo constar la buena caza que existía por estos alrededores sobre todo de puercos jabalís. Era -dijo- por la existencia de buenos pinares, que desaparecieron de la Sierra de la Pila por un gran incendio en 1780, que dejó pelada la sierra.

Antonio de los Reyes