El anuncio hecho a María
El anuncio hecho a María

El anuncio hecho a María

Pirograbado coloreado. (190 x 245 cm.). Año 1978.

En innegable primera instancia, se muestra en este panel la rosa mística que asciende del vientre de María -anunciando un fruto glorioso en esa entraña-, protegida por su mano amplia y abarcadora, y el Espíritu que la engendra, con ornato vegetal sobre el lomo y un esplendor botánico que le da el fasto de un pavo real; esa paloma se escapa de otro seno, el del ángel que llega con prisa peinándose en vientos de huracán sobre su cabellera, y deja fluir entre unas manos cósmicas la energía genética de la Divinidad, mientras se recoge en una reverencia con estrambote versallesco, ante la Dama-Señora.

La parte izquierda del espacio ofrece un friso vertical humano de rostros entristecidos, especialmente el del padre Adán, que se arrebujan contra la espalda de la Refugium peccatorum. A un doncel escuálido que orienta el ángulo superior izquierdo del marco se le mustia, como todo lo que mustia la Caída, un matojo de hojas de tabaco. Ese grupo alude a la condición humana ennegrecida por el foscor del abismo primordial, insuperable para las fuerzas del hombre. Sobre la frente del segundo rostro, desde arriba, figura la gema de un mini sol/esperanza con elementos vegetales, referido a la profecía del Génesis, preparando y antecediendo al anuncio que ahora se proclama.

El panel está enmarcado por la humanidad y la flora contaminadas de sombra; la fauna se dobla en el ave que porta, como un chal, la paz generatriz del Príncipe de la Paz, en el seno de la mujer. Queda, en primer plano a la derecha, la revolera estilizada de un excedido ramo de olivo, emblema de ese Príncipe. Debe quedar advertida la línea elíptica que arranca del hombro de la doncella y se extingue en el plumaje del ala angélica.