Los jóvenes huertanos se vieron arropados por la música de la rondalla[Bando de la Huerta Infantil 2005]
Los jóvenes huertanos se vieron arropados por la música de la rondalla
Región de Murcia Digital

Las manifestaciones en forma de cánticos son muy abundantes dentro de toda tradición oral, conociéndose canciones populares que se suelen transmitir de padres a hijos. Ejemplos significativos de ello son las que están relacionadas con determinadas faenas del campo murciano.

Cantos de labor

Debido al carácter agrario de la Región de Murcia, predominarán aquellos cantos referidos a las tareas y faenas relacionadas con el campo y la huerta. Constituye ya una tradición bien arraigada el que el campesino o huertano amenice su trabajo tarareando o cantando canciones que le ayudan a hacerlo más llevadero. Éstas son anónimas y van perdurando al ser escuchadas de generación en generación, de padres a hijos que continúan la labor.

Canciones de trilla

En ellas se percibe una clara influencia flamenca al alargarse en la interpretación el final de cada verso. El cantaor dará voz de forma desgarradora a estas canciones mientras ejecuta las labores propias de trillar.

¡Venga! ¡Venga! ¡Fuera, Morica fuera!
¡Fuera, fuera, vamos a trillar!
¡Fuera, fuera Morica!
De los cuatro muleros,
Que van al agua
El de la mula torda
¡Ay! Que me roba el alma.
¡Fuera, fuera Morica, fuera!
Me roba el alma ¡mare!
Que me roba el alma.
De los cuatro muleros
Que van al agua.
¡Fuera, fuera Morica, fuera!
¡Vaya, vaya!
La parva está trillada
Que venga el dinero
Estas son las coplicas
¡Ay! Que de los muleros
¡Fuera, Morica, fuera!
De los muleros, ¡nena!
¡Ay!
De los muleros
La parva está trillada
¡Ay! Que venga el dinero
¡Fuera, Morica, fuera!

Cantos de hoja de la seda

Otra de las faenas más usuales es la de la recogida de la seda, que tiene lugar a principios del mes de Abril. Estas canciones tienen un carácter marcadamente melancólico y lánguido. Sus letras reflejan tanto esperanzas como incertidumbres de los trabajadores que han de soportar duras condiciones climatológicas y laborales, aunque los estribillos suelen ser algo más animados.

Se cría en el mes de abril,
El gusano de la seda
Se cría en el mes de abril,
Con hoja de las moreras
Para que trabaje al fin
Y saquemos buena seda.