Documentadas desde el siglo XIII, estos pasatiempos o juegos han estado tradicionalmente muy ligados al ámbito rural y huertano de Murcia. Las adivinanzas han reflejando algunas de las principales tareas laborales del mundo agrario.

A continuación ofrecemos el dibujo de las cuatro estaciones del año en forma de adivinanza:

Hago encenderse en las venas
La sangre de los amores;
Pinto la rosa en colores,
Y la mezclo con las azucenas
Y cubro el mundo de flores.
¿Quién es?
(La primavera)

Ardo, pero no en amores,
Achicharro al jornalero
Me aborrecen los pastores,
No me quiere el caballero.
¿Quién es? (El verano)

     

No me basta ser templado
Para que no enfermen más
Por que yo mismo he enfermado
Y mi mal conocerás,
En haberme deshojado.
¿Quién es? (El otoño)

 

Cuando me empiezo a mojar
De madre salen los ríos
Y hago al más fuerte temblar;
Y después de tantos bríos
En el fuego voy a dar.
¿Quién es? (El invierno)

La temática no obstante puede ser muy diversa y el entretenimiento está en descubrir la solución a un enigma planteado, que puede ser de muy fácil respuesta o algo más complejos.

En medio del cielo estoy
Sin ser lucero ni estrella.
Sin ser sol, ni luna bella
A ver si aciertas quien soy.
(La letra “e”)

Gordo lo tengo,
Más lo quisiera,
Que entre las piernas
No me cogiera.
(El caballo)

     

Lana sube,
Lana baja.
(La navaja)

 

¿Quién es el hijo de viejo,
Que tiene otros once hermanos
Sin cabezas, pies ni manos?
 (El año)