El Club Deportivo Cieza disputó el primer partido oficial de su historia el 14 de diciembre de 1924 ante el Club Deportivo Muleño. El encuentro originó una gran expectación, no sólo por ser de carácter oficial, sino también por la gran rivalidad que había surgido entre ambos clubes en el mes de marzo anterior, a raíz de la disputa de un trofeo.

    El partido entre ciezanos y muleños correspondía a la primera jornada del Grupo Norte de Primera Categoría Regional en el que también militaban el Athlétic de Jumilla, el Hellín Deportivo y el Almansa F.C., si bien estos dos últimos clubes se retiraron antes del inicio de la competición.

Alineación histórica

    El interés por confeccionar plantillas competitivas que aspiraran al ascenso de categoría hizo que ambos equipos ficharan a varios jugadores foráneos, de modo que las formaciones iniciales sufrieron varios cambios con respecto a las alineaciones habían presentado los dos clubes nueve meses antes.

    La primera alineación de la historia del Cieza en un partido oficial estuvo formada por García; Arnau, Monzó; Carpio, Baños, Calahorra; Salinas, Julio, Juanele, Cerrajillas y Moltó. Entre las novedades de los ciezanos destacaban los fichajes de Moltó del Alicante, García del Elche y Juanele del Natación de Alicante. El árbitro del encuentro fue el ex jugador del Murcia Foot Ball Club, Ernesto Casanovas Augé.

    El encuentro finalizó con victoria del Club Deportivo Cieza por 2-0. Los dos tantos fueron conseguidos por el jovencísimo Julio, quien a sus 16 años fue, a juicio de los cronistas, el mejor jugador del partido. “Julio es el delantero más peligroso que hemos conocido por esta región. Tiene un estilo tan elegante que entusiasma a cuantos le ven jugar; regatea con una facilidad asombrosa y cuando escapa con el balón lo hace a una velocidad tan fantástica que no hay forma humana que lo detenga”.

Una temporada exitosa

    Según afirma un periodista de la época el partido fue dominado por el Cieza que dispuso de numerosas ocasiones para marcar, pero en unas ocasiones la falta de puntería y en otras la buena actuación del portero visitante, Marín impidieron los tantos. El dominio de los locales fue tan abrumador que los ciezanos sacaron 12 córners, mientras que el Muleño sólo dispuso de uno.

    Esta victoria fue el comienzo de una temporada triunfal. El Cieza finalizó como campeón del Grupo Norte de Primera Categoría, lo que le otorgó la oportunidad de disputar el ascenso a la máxima división del fútbol murciano en una eliminatoria a doble partido ante La Unión. Finalmente, los ciezanos consiguieron su objetivo tras derrotar a los unionenses en los dos encuentros. Esta victoria le otorgó al Club Deportivo Cieza la oportunidad de enfrentarse en la temporada 1925/1926 a los tres mejores equipos de la provincia: el Real Murcia, el Cartagena y el Deportivo Murciano.