Murcia

     Molina Sánchez pertenece al grupo enmarcado en la Generación Puente, artistas que ocupan un periodo de tiempo situado entre la generación del 27 y la aparición del grupo Puente Nuevo en 1960 y que se relaciona con las nuevas vanguardias.

     José Antonio Molina Sánchez comenzó haciendo ilustraciones para periódicos y revistas de la época, pero no tardó en aflorar en él un sentir pictórico.

     Utiliza el dibujo sin excesos formando un todo unitario. Es capaz de dominar tanto la pintura como el dibujo. Considerado un pintor lírico su obra se centra en su ideal de belleza, huyendo de todo elemento grotesco.

     Entre sus obras, destacan:

• Mural del hall del edificio nº 3 de la Gran Vía Alfonso X el Sabio de Murcia. (Antiguo edificio de Idasa).

• Mujer, Real Academia de Bellas Artes Santa María de la Arrixaca de Murcia.

• El Caballero, Museo de Arte Contemporáneo de Madrid.

Etapas

     Su obra ha sido clasificada según las diferentes etapas artísticas:

1ª Etapa: de figuración objetiva (hasta 1946)

     Su primera etapa estuvo caracterizada por la sobriedad en el uso del color y reducción de la realidad a lo esencial.

Obra: Bodegón de las sardinas, Bodegón de la navaja, El niño y la muerte (1945), retrato de Carmen Conde (1946), retrato de Mercedes (1946), retrato de Amanda (1946) y Desde la terraza (1943).

2ª Etapa: Preocupación socio-testimonial (1947-1951)

     Su obra surge de la necesidad de dar testimonio. El viaje que realiza por Castilla para conocer mejor el arte románico produce en él una ruptura con el naturalismo que queda patente en algunas de sus obras. También aparecen las primeras notas poéticas.

Obra: Tobías y el ángel, Mujer con guitarra, retrato de Antonio Oliver (1947), Joven sentada (1950), Mujer sentada (1948), Alegoría (1950), Alegoría del Derecho Civil (1950) y Ángeles bañándose (1951).

3ª Etapa: Vírgenes necias y prudentes (1952- 1956)

     Este periodo da comienzo en los años que decide establecerse en Madrid y contraer matrimonio. Su producción es principalmente de temática religiosa, por ello esta fase utiliza como nombre la parábola relatada en el Evangelio de San Mateo. Sus obras presentan un esquematismo de los elementos que se representan. Influye en su obra la estética arcaizante que utilizaba el artista italiano Massimo Campigli.

Obra: Los mineros (1954), Bebedor de cerveza (1954), El pino (1956), Vírgenes necias y prudentes (mural) (1952), Ángel músico (1952), Ciclista (1953), Niña con sombrero (1953), La lección (1954) y Juego de niños (1956).

4ª Etapa: Expresionismo abstractizante (1957-1961)

     Los influjos de surrealismo derivan en su obra en formas menos rotundas y más cercanas a la abstracción.

Obra: La peluquera (1957), Matador de patos (1957), Perfil femenino (1958), La pensativa (1959), Hombre con chistera (1960), Academia (1960), Encaje de bolillo (1958), La rubia (1959), Perfil azul (1959), Libro malo (1960), Toro florido (1960), Maternidad (1961), El frutero rojo, La mesa o Cabeza de caballo son algunas de las obras que realiza en este período.

5ª Etapa: Expresionismo lírico (1962-1965)

     Es el momento en el que su obra deja constancia de las repercusiones que tienen lo lírico, lo poético. Utiliza un expresionismo próximo a la obra de los artistas centroeuropeos como Schiele o Klimt.

Obras: La cabra (1962), Jugando con la pelota (1962), Escena con saltimbanqui (1963), Ante el espejo (1965), Anunciación (1962), Lope de Vega (1963), Retrato de Amparo (1964), La comida de los pavos reales (1964), Rubén Darío (1964), Con flores blancas, Te espero hoy o Ariel.

6ª Expresionismo africano (1965- 1967)

     Tras su viaje por África realizó numerosas obras que se inspiraban en este continente. Utiliza de nuevo la figuración.

Obras: África de Angola (1966), África cerca del desierto. Angola (1966), África camino de la Gorongosa (1966), África la bella (1965), África de Santo Tomé (1965), África de Angola (1965), África por la senda (1965), África Imbondeiros. Angola (1965), África dos amigos (1965), Mercado de Luanda (1965), Camino de Gorongosa (1965), o En el prado (1967).

7ª Etapa: Concretización de la figura (1968)

     Período en el que alcanza la plena madurez pictórica y en el que conoce perfectamente la naturaleza de la pintura, que utiliza con gran elegancia y sensibilidad. Consolida una tendencia neofigurativa surgida en el período anterior, el color aparece como un elemento primordial de reflexión, al liberarlo de toda veracidad.

Obra: Pan (1975), El lindo (1979), Escenas taurinas (1980), Amazona (1983), Mujer (1986), El hijo pródigo (1998), San Miguel (1966-68), San Gabriel (1966-68), Sorpresa (1970), Juego de bolos (1970), Menina (1971), Mujer con flores (1972), Mujer con paraguas (1973), Retrato de mujer (1974), La egipcia (1975), Ángel sentado (1975), Se ofrece (1976), Cogiendo rosas (1977), Niña con flores (1978), El banco de piedra (1979), Alegoría de la construcción de la Catedral (1980), La columna (1981), Dos triunfos (1981), La palma (1981), Siempre perseguido (1983), retrato de Salvador Jiménez (1983), Anunciación (1986), Tiempo sin agujas (1995) y El hechizo de la rosa (1996).