Detalle de las hojas y frutos de un espino negro.
Detalle de las hojas y frutos de un espino negro.
José Antonio Fernández Martínez
Fauna de las Salinas [ San Pedro Los Cuarteros]
Fauna de las Salinas

La Flora de las Salinas

Desde el Mar Mediterráneo, con las praderas de Posidonia oceánica, hasta el Mar Menor, los biotopos del Parque ofrecen una gran diversidad.

En paralelo a la playa, las plantas se adaptan a la movilidad, porosidad y escasez de nutrientes del sistema dunar; la oruga de mar y el cardo marítimo ocupan las zonas más expuestas al mar. Detrás, fijando las dunas gracias a sus largos y abundantes rizomas, está el barrón, el cuernecillo y la azucena de mar.

En las dunas más estables, con más nutrientes y protegido del viento marino (maresía), está el matorral mediterráneo, con especies como el lentisco y el espino negro, destacando en el Pinar del Coterillo (de pino carrasco), algunos pies de sabina costera.

Los saladares se sitúan en las zonas más bajas y encharcadizas, con especies como la siempreviva y la sarcocornia o almarjo, adaptadas a vivir en zonas con altas concentraciones de sales.

Donde el agua permanece más tiempo podemos encontrar tres especies de juncos. En Las Encañizadas y en el sector Noroeste del Parque, encontramos saladares más homogéneos y extensos.

Dentro de los límites de la banda de protección, se desarrollan algunas masas de carrizo que enriquecen la biodiversidad del conjunto del Parque.

La Fauna de las Salinas

La fauna es muy variada, dominando las aves acuáticas. Además, viven otras especies, algunas de ellas en peligro de extinción como el Fartet, pez endémico del litoral levantino, y el pequeño escarabajo Scarites aurytus, habitante de las dunas.

Otras especies de interés son el eslizón ibérico y la lagartija colirroja, dentro del grupo de los reptiles, y la musaraña, musarañita y comadreja, en lo que respecta a los mamíferos.

Dentro de las aves, la importante colonia nidificante de avoceta, cigüeñuela, chorlitejo patinegro, charrancito y pagaza piconegra ha motivado que este área protegida haya sido declarada Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).

Las especies en paso migratorio o invernando presentan una mayor diversidad. Por su vistosidad y abundancia destaca el flamenco (curiosamente convertido en símbolo del Parque, aún siendo estacional), y los limícolas como zarapitos, agujas, archibebes, chorlitejos, etc.; las garzas, el tarro blanco, cormoranes, somormujos, zampullines, gaviotas, etc...

Además de las aves acuáticas, otras especies de aves que enriquecen el Parque son el águila pescadora, especie muy escasa y en declive en la Península, por lo que es muy importante su seguimiento y protección, el martín pescador y la terrera marismeña, entre otras.

La Flora y Fauna del Mar Menor

La vegetación del Mar Menor se ha originado a partir de las especies llegadas del litoral mediterráneo. Una de las peculiaridades del mar interior es la vegetación que se asienta sobre los substratos blandos (fangos y arenas). La mayor parte de ellos están cubiertos por praderas de clorofíceas (fanerógamas adaptadas a la vida marina).

Las finas arenas existentes en el fondo de la laguna no desarrollan grandes masas de vegetación, pero acogen a una de las especie más conocidas: el langostino del Mar Menor, típico habitante de los fondos arenosos de La Manga, y objeto de una importante pesquería debido a su alto valor comercial. También destaca la presencia del Caballito de Mar, las medusas y los moluscos.