La diputación de La Paca cuenta con parajes de gran riqueza y diversidad natural como las abundantes lomas que salpican sus campos y el alto denominado Morrón de La Paca.
La sierra que corona este cerro se alza próxima a la población, escarpada por alguno de sus frentes como si de una muralla protectora se tratase y recorrida por sendas y caminos que culebrean entre sus riscos y permiten acceder a su cumbre.
Por otra parte, la explotación agrícola de las tierras de la diputación ha modelado un paisaje muy característico de surcos paralelos que se extienden hasta el horizonte y donde, de vez en cuando, un altozano rompe el ritmo del secano para asomarse al horizonte.