Biografía
Miguel Sánchez Gil. Mula, 1901-El Berro (Alhama de Murcia), 1971.
Familia molinera, su carrera militar y la medicina
Miguel Sánchez Gil nació en Mula, en una familia humilde de molineros. El trabajo del molino no le atrajo como al resto de su familia.
Estudió la carrera de practicante y pensó en el ejército para continuar su vida, más concretamente en el cuerpo de carabineros. Estuvo bajo las órdenes de Franco en África y poco después lo trasladaron con su mujer e hijos a Tarragona, a la base militar de Ampurias.
A principios de los años 30 lo destinaron a La Azohía (Cartagena), a la sección de cañoneros.
En 1936 fue ascendido a sargento del regimiento de carabineros. Ese mismo año estalló la Guerra Civil.
La victoria de los nacionales y su situación en zona republicana le supusieron una condena de cuatro años de prisión, y la eliminación de sus rangos militares y sus estudios médicos. Tras salir de la cárcel volvió a Mula con sus padres, su mujer y sus hijos, donde trabajó un año en el molino de su familia.
Tras la Guerra Civil, inicia una nueva vida: el molino
En 1943 decidió mudarse a El Berro y vivir allí. Compró un molino en ruinas que se encontraba en la pedanía y lo rehabilitó.
La localidad no contaba con molino lo que supuso un avance para la elaboración de comida en una época donde los alimentos escaseaban. La población de toda la zona llegaba a su molino con ingredientes para moler.
El molino además de ser rehabilitado fue transformado coincidiendo una época muy rica en lluvias. Parte del mismo se hizo hidraúlico por lo que no dejaba de funcionar y así la población podía recurrir a el en cualquier momento.
Los avances del 'tío Miguel'
En los años 50 el 'tío Miguel', así era conocido Miguel Sánchez Gil en El Berro, consiguió la primera radio para la población, un avance que nadie en la zona se podía creer. Todos se acercaban al molino para ver ese progreso. Además mediante un generador propio consiguió tener luz eléctrica, y de esta forma poder trabajar cuando caía el sol.
Su labor como médico
Con los conocimientos que atesoraba en medicina ayudó a todos sus vecinos. De modo altruista, servía de médico para urgencias y asuntos de poca importancia.
Don Miguel Sánchez Gil ha quedado en el recuerdo de toda la población de El Berro por su humildad y su modo de actuar, aún cuando han pasado más de treinta años de su muerte.