SITUACIÓN DEL FLAMENCO EN LA REGIÓN DE MURCIA

A pesar de la gran repercusión mediática y el numeroso publico asistente a los dos grandes festivales flamencos de la Región, la situación del flamenco en Murcia no es muy halagüeña. En primer lugar falla la base: las peñas. Estas no son muy numerosas (22), apenas tienen presupuesto para realizar actividades, están desunidas, pues falló aquel intento de federarse como las peñas andaluzas, y la media de edad de los socios supera los 45 años. Quizá esto último sea lo más significativo. El alejamiento de los jóvenes del flamenco supone que la nómina de cantaores murcianos sea la misma que hace diez años. El más joven es Curro Piñana, nacido en 1974, aunque ahora ha irrumpido Victoria Cava. En la guitarra pasa algo parecido, a pesar de la grata aparición de Cayetano Moreno Castro, siendo en el baile donde tenemos dos grandes promesas: Cinthia Cano y Ana Belén Ruiz.

El apoyo institucional se limita a los festivales veraniegos, y esto no es Andalucía, hay que cuidar más a las peñas y a las iniciativas de los jóvenes. Se debe patrocinar la grabación de discos a nuestros cantaores para que quede constancia de su arte. Es intolerable que El Bongui, Bastián, El Potro o El Gaditano sigan inéditos en disco. La pena es que algunos de ellos, por la falta de actividad, ya no pueden cantar como antaño. Hay muchas ideas para fomentar este arte tan nuestro: más dinero a las peñas en un plan integral diseñado desde la Consejería de Cultura donde se apueste por los nuevos talentos (algunos dedicados a la copla por razones de supervivencia) donde se haga girar a los artistas locales por las peñas de la región y centros culturales, grabar y distribuir discos de nuestros artistas, acercar el flamenco a las escuelas introduciéndolo en el currículo escolar y generando charlas y actuaciones en colegios e institutos. Y, por supuesto, volver a intentar federarse, pero con otras condiciones y otros dirigentes.

Ideas e iniciativas hay muchas, pero hace falta la unión de las peñas y ayuda institucional, además de mayor apertura de las peñas a la juventud porque algunas peñas solo permiten la entrada a sus actividades a los socios. Es Obvio que la mayoría de los jóvenes no se puede permitir un abono anual o mensual. Habría que buscar otras fórmulas de participación.

Desde la Asociación Flamenca Murciajonda, estamos proponiendo iniciativas para modernizar el asociacionismo y la forma de divulgar el flamenco en Murcia, creando, entre otras cosas, la Web del flamenco de la Región de Murcia.