Free cookie consent management tool by TermsFeed Miguel Poveda: Tierra de calma - Región de Murcia Digital
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Miguel Poveda: Tierra de calma

Miguel Poveda: Tierra de calma

Miguel Poveda
Miguel Poveda

    Tierra de calma quizá sea el disco flamenco más esperado de este año, junto con Morente sueña la Alhambra. Y ambos tienen relación, pues, a pesar de ser buenas obras, han supuesto dos pequeñas decepciones para los que amamos también el flamenco libre, que el mismo Morente fundó.

    Centrándonos en la última obra del catalán, hemos de decir que supone un parón en su carrera pues no llega a la maestría de Zaguán, su anterior disco. Esta afirmación se basa en la pedestre producción de Juan Carlos Romero y el desastroso acompañamiento que este tocaor onubense ha desarrollado para Poveda. El catalán ha buscado en otras músicas estos últimos años con éxito, pero no ha volcado esa experiencia en su creación flamenca actual. Y eso que el disco es flamenco no ortodoxo, pero ha errado en la dirección: las sevillanas, la farruca y la copla suenan a copla. Incluye tres palos a compás, dos bulerías y unos tangos. Esto da una pista de la idea de convertir este álbum en una obra accesible a todos los públicos. Esto no quiere decir que no haya calidad en la interpretación. Esas bulerías a medias con Diego Carrasco son deliciosas y el solo "olé" de Poveda eriza el vello.

    Pero lo peor de esta obra han sido las malagueñas con abandolao, no solo por la ausencia de duende y dramatismo, propios de las grandes malagueñas, sino porque Poveda anunció que iba a crear unas malagueñas personales. Y ha fallado, pues no pasarán a la historia.

    El aspecto creativo y atrevido en el que ha salido victorioso se manifiesta en la seguiriya con cabal, a la que imprime un aire misterioso y melancólico muy personal, y en las soleares donde Miguel parece estar abriendo camino.

    Una obra buena y recomendable a todas luces, pero insuficiente dado el nivel creativo potencial de Miguel Poveda. Supongo que un error lo tiene cualquiera pero está en un lugar de privilegio en el que no puede permitirse tropiezos. Espero que no tarde mucho tiempo en ofrecernos una nueva creación.

Pedro Fernández Riquelme