Nonihay
Historia y Patrimonio
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hasta el momento que nos puedan revelar el origen de esta pedanía de Aledo, algunas de las arquitecturas que aún existen en su paisaje, con puntos muy dispersos de población, son caseríos del siglo XIX. Se desconoce el origen del topónimo, aunque parece la respuesta a alguna pregunta: No, ni hay. Como parte del entorno de Aledo, estas tierras debieron presenciar muchos de los episodios que suman la Historia de este municipio, uno de los más antiguos de la Región, cuya realidad histórica se conoce a través de numerosos documentos, siendo los más antiguos de época medieval.
La torre y fortaleza de Aledo ya existía en el siglo IX como hisn, pero fue en el siglo XI cuando se inició la construcción del Castillo de Aledo. Su ubicación geográfica le hizo protagonizar algunos de los momentos más tensos de la Historia del Medievo en Murcia. Durante la ocupación musulmana la torre se convirtió en un bastión de gran interés estratégico, dada su cercanía a la frontera granadina. En el 1086, Aledo fue tomada por el famoso caballero castellano García Jiménez. Desde esta plaza fuerte, las huestes cristianas llevaron a cabo durante años expediciones guerreras por Murcia, Almería, Granada y Jaén, además de una intensa labor de saqueo y destrucción. Pero sería recuperada nuevamente por fuerzas musulmanas en el 1096.
El 14 de abril de 1257, Alfonso X 'el Sabio' otorgó Aledo a la Orden de Santiago. Comenzaría entonces un dominio y administración de la villa por parte de la Orden, que se prolongaría hasta el siglo XIX. Mientras que Aledo mantenía a un nivel demográfico mínimo durante la época medieval y moderna, Totana, arrabal de Aledo, crecía en población y recursos. En 1494, los Reyes Católicos confirmaron los privilegios de la villa de Aledo, quedando sus pobladores exentos de pagar tributos. Pero los privilegios no solucionaron el problema demográfico.
En 1550 las reuniones del Concejo se ubicaron en Totana, y en 1553 la Orden de Santiago se trasladaría a su nueva sede. El crecimiento de Totana continuó y en 1793 se segregaron ambas villas y comenzaron a administrarse de manera independiente. Nonihay queda dentro del ámbito agrícola de Aledo. Si en época moderna los cultivos se dedicaban a la cebada, el trigo, el aceite, el vino, los forrajes, el cáñamo, el maíz, la sosa y la barrilla, durante la época contemporánea serían los cultivos de parra y esparto los más importantes.
Economía
El sector predominante en la economía de Nonihay ha sido y sigue siendo el agrícola. El núcleo de población de esta pedanía se encuentra ubicado junto a la Rambla de Lébor y al pie de la cara oeste del Cabezo de Los Molinos, las tierras que lo rodean están dedicadas a cultivos de regadío, fundamentalmente uva, algo de almendro y olivo y algunas tierras de labor de secano o pastos.
Sin ninguna duda, es el cultivo de uva de mesa el económicamente más rentable en estas tierras, los parrales cubren la mayor parte del territorio de Nonihay. La variedad cultivada mayoritariamente es la llamada Dominga, variedad que estaría protegida bajo la Denominación de Origen Uvas de Espuña, es una uva blanca de estación tardía, se trata de una mutación espontánea surgida en la zona, esto, junto al microclima en el que se cultiva, da lugar a un producto de gran calidad. Se la conoce por otros nombres como Murciana Blanca, Gloria o Uva Verde de Alhama. También se cultivan variedades apirenas o sin semillas.
Gastronomía
La cocina de esta pedanía es variada a la vez que sencilla y con los ingredientes básicos de la cocina mediterránea. Las carnes de cordero, cerdo, conejo o aves, junto con verduras, hortalizas, legumbres y frutas configuran recetas sabrosas y saludables, más ligeras cuando son elaboradas en las estaciones cálidas y más contundentes en las frías.
Quizá uno de los platos más singulares de la pedanía sea el jallullo, preparado con algunos ingredientes comunes a los de las gachasmigas, igualmente populares y de parecida elaboración. El jallullo se hace con tocino, longaniza, pimiento seco, cebolla, ajo, harina, agua, sal y aceite, en algunas casas se le añade también bacalao.
Otros más conocidos, pero igualmente tradicionales, son los arroces como el de verduras con bacalao desalado o el de conejo. Los arroces son especialmente apreciados si se cocinan sobre leña, por el sabor singular que les aporta.
Los guisos de carne y los de verduras también perduran en la cocina típica de Nonihay, así podemos hablar de la olla de cerdo, los michirones, los potajes de verduras y legumbres y los hervidos de coliflor, alcachofas o judías.
Naturaleza
El paisaje de Nonihay está dominado por la vegetación mediterránea. Destaca el monte bajo con arbustos como la coscoja (Quercus coccifera), el romero (Rosmarinus oficinalis) y especies herbáceas como cardos y ortigas. También es un hábitat propicio para el pino carrasco (Pinus halepensis). Entre la fauna que puebla estos parajes destacan aves como el Halcón peregrino (Falco peregrinus), el Búho Real (Bubo bubo) o las perdices.
El accidente geográfico más sobresaliente en esta zona es quizás el llamado Estrecho de la Agualeja o de la Arboleja, como también se le conoce. Las areniscas y calizas, que son los materiales dominantes en este lugar, han sido talladas por los caudales de la Rambla de Lébor, afluente del Río Guadalentín, originando esta garganta en el tramo medio de la misma rambla. En las paredes de este cañón se puede apreciar la erosión en panales de abeja producidos en la arenisca por diversos agentes geológicos.
Otro aspecto interesante de este lugar son los abundantes restos de fósiles marinos que pueden ser observados a lo largo de las paredes de este estrecho. Moluscos bivalvos, corales o esqueletos de equinodermos son algunos de ellos.
Fiestas
Los escasos vecinos de Nonihay se trasladan a Aledo para celebrar algunas de sus fiestas locales más populares. Así, en agosto se celebran las fiestas dedicadas a los patronos del municipio, Santa María la Real y San Agustín, y en Navidad se celebra el popular Auto de los Reyes Magos. Otros momentos festivos destacados son los días de Semana Santa.
Actuaciones musicales, procesiones, actos litúrgicos, el día del carro, las citas gastronómicas, los eventos lúdicos y un gran etcétera, son momentos de diversión y conmemoración que los vecinos de Nonihay siempre disfrutan en Aledo.