Mula

Orígenes

Hacia 1800, el presbítero muleño Francisco González Dato adquirió la parte oriental de Baños de Mula a los Ladrón de Guevara, y fundó allí una hospedería para refugio de los pobres que iban a tomar las aguas y no podían costearse la estancia, y una ermita, que puso bajo la advocación de la Purísima Concepción, titular del hospital de Mula, del que fue mayordomo. A su muerte, en el año 1813, donó esos inmuebles a la institución hospitalaria. Poco duró el legado, ya que los herederos revocaron el testamento y el Hospital perdió la donación de Los Baños.

Pascual Madoz, en su "Diccionario Geográfico¿", dice que la ermita era de culto público y habla extensamente de las propiedades curativas de las aguas termales de este lugar.

Los lugareños afirman que pertenecía a una de las viviendas a las que se haya adosada (la ermita se halla entre medianeras) aunque en la actualidad es  propiedad del Obispado.

Personajes

Varias son las personas que participaron en el devenir histórico de la pedanía muleña de los Baños de Mula. Entre ellos cabe destacar a Alonso Yánez Fajardo, Adelantado del reino de Murcia, en el siglo XIV, y antepasado de los Marqueses de los Vélez, fue propietario de la aldea.

Un hito importante en la historia de los Baños de Mula, lo va a marcar hacia 1800, el presbítero muleño Francisco González Dato, que adquirió la parte oriental de Baños de Mula, y fundó allí una hospedería y una ermita que puso bajo la advocación de la Purísima Concepción.

En la primera mitad del siglo XIX, todo el terreno del actual caserío pasó a ser propiedad de la familia Ladrón de Guevara.