Fases de fundación y apogeo

Las diferentes campañas de excavación llevadas a cabo en el yacimiento han aportado, a rasgos generales, cuatro fases en la villa. La primera, probablemente de mediados del siglo I d.C, sería la fundación de la villa, momento en que en nuestra región marca un auge de creación y desarrollo de establecimientos agrícolas.

Una vez arrasadas las estructuras de este período, se reedifica la villa aprovechando en parte las estructuras preexistentes; esto sucede durante la segunda mitad del siglo II d.C. y comienzos del III. Es el período en el que la villa debió alcanzar su mayor capacidad productiva. A esta fase correspondería buena parte de las habitaciones, las termas y la gran cisterna.

Abandono del asentamiento

Durante el siglo IV y primera mitad del V d.C, tercera fase de ocupación, se realizan reformas en algunos de los espacios de la villa y se producen algunos cambios en los sistemas de producción y almacenamiento. Durante la última fase se produce el abandono del establecimiento. Algunos de los espacios aún serán reutilizados por una población residual  para la instalación de una necrópolis de inhumación, algunas de cuyas tumbas han sido excavadas durante los últimos años. Esta ocupación residual tuvo lugar en la segunda mitad del siglo V. d.C.