Situado en la calle principal de la ciudad se encuentra el conocido como Conjunto Monumental de Santo Domingo. De éste se conservan actualmente la mayor parte del Convento de Santo Domingo y, sobre todo, la Capilla del Rosario.

Las tres partes del claustro que aún siguen en pie datan del siglo XVII, a lo largo del cual los dominicos fueron construyéndolo con la participación de canteros tales como Antonio de la Rosa y Lorenzo de Mora.

El Convento o Iglesia, recientemente restaurado, presenta un interior de una sola nave, con capillas laterales, que fue reformado a comienzos del XVIII dotándolo de una falsa bóveda de cañón y de pilastras simuladas. En la Capillla del Cristo del Rescate se recuperaron las pinturas murales antiguas, de un cierto mérito, atribuibles al pintor local del XVIII, Baltasar Martínez Fernández de Espinosa. La portada data de 1608 y se debe a Andrés de Goenaga.

Actualmente es sede del Museo de Bordados donde el Paso blanco, una de las principales cofradías de los desfiles bíblico-pasionales de Lorca, exhibe una muestra de los mejores trabajos realizados en sedas y oro, así como carros, armaduras y otros objetos que forman parte de la puesta en escena de los diferentes grupos que procesionan en Semana Santa.