Ayuntamiento en Alumbres, una corta experiencia en el s. XIX

  Según la Constitución de 1812, cualquier población con más de mil habitantes debería constituir Ayuntamiento propio, y en Alumbres existían más de 2.500 pobladores, por lo que se instaló en el domicilio del sacerdote el 4 de julio de 1813. El nuevo término municipal quedaría integrado por Roche, Garbanzal, Rincón de San Ginés y Escombreras. Un año y un mes más tarde, en Real Cédula, por orden del regresado Fernando VII se ordenó que se anularan los Ayuntamientos creados a raíz de la Constitución de 1812 y Alumbres pasaba de nuevo a ser diputación de Cartagena.

  En 1820, la vuelta de los liberales al poder en España devolvió la situación de 1813 a la población. Un año más tarde San Ginés de la Jara y el Estrecho de San Ginés abandonarían el Consistorio de Alumbres y pasarían a formar parte de El Algar. En 1823 se restauró el absolutismo en España; se abolió la Constitución y el Ayuntamiento de Alumbres quedaba disuelto de manera definitiva.

  A mediados del siglo XIX se reanudaron los trabajos de minería en la zona, y la población de Alumbres volvió a resurgir, a la vez que hubieron mayores fondos para los gastos dedicados a la educación. Seis mil trabajadores desarrollarían en la década de los 50' el sector de la extracción, aunque en los años siguientes entraría de nuevo en declive. Una de las empresas creadas debido al auge económico de estos momentos fue la fábrica de cerámica denominada 'La Amistad'. Sus productos invadieron toda la Región de Murcia durante medio siglo, siendo exportados también al resto de España e incluso al Norte de África.

  En 1873 en Cartagena se produjo un levantamiento cantonal, que pretendía más federalismo en la República. Debido a la revuelta la minería sufrió una fuerte recesión y muchos trabajadores de Alumbres y La Unión quedarían sin sus trabajos, debido a la inseguridad provocada por el movimiento. Alumbres se dispondría a favor del movimiento cantonal, pero poco después fue tomada por los unitarios. Tras este episodio mejoraron los accesos desde Cartagena, inaugurándose un tranvía a vapor, con apeadero en Alumbres, que unía la capital municipal con Las Herrerías.

  A finales del siglo XIX la compañía Franco-Española de explosivos y Productos Químicos instaló una de sus empresas en la diputación de Alumbres, y en 1897 se convertiría en filial de la Unión Española de Explosivos. La instalación de empresas en las cercanías tiene su origen en estos últimos años del XIX.

  Siglo XX

  Los comienzos del siglo XX vieron cómo decaía la minería, y muchos trabajadores perdían su empleo y se encontraban con un futuro desolador. Fueron muy frecuentes las huelgas en toda la cuenca minera, a las que se unían los obreros sin trabajo y los que demandaban de sus empresas unos mejores salarios y condiciones laborales. El estallido de la Primera Guerra Mundial (1914-18) provocó el cierre temporal de la minería, que ya no lograría recuperarse.

  El municipio de Cartagena quedó en zona republicana durante el estallido de la contienda española. Alumbres seguiría los pasos del Ayuntamiento de la capital municipal y entre su población habría un gran movimiento político, pero también personas que no querían ser partícipes de una guerra fraticida, y partían hacia otros países europeos. Uno de los lugares de Cartagena donde se vivió un mayor número de conflictos fue la Batería de Sierra Gorda, próxima a Alumbres.

  Al concluir la Guerra Civil (1936-39) la pobreza y el hambre se apoderaron de las poblaciones circundantes de Cartagena, entre ellas Alumbres. Los edificios habían sido aniquilados por las bombas de los dos bandos, la iglesia del pueblo estaba prácticamente en ruinas. A mediados del siglo XX la situación experimentó una pequeña variación, ya que el agua del Taibilla llegó a Alumbres y se instaló un grifo público y comenzó la reconstrucción de las fábricas instaladas en Escombreras, dando trabajo a numerosos habitantes de la población. Para facilitar la comunicación entre la capital municipal y Escombreras se inauguró en 1958 un nuevo tramo de vía que, al pasar por Alumbres, dividió el pueblo en dos.

  A partir de los años 60' se fue sucediendo en la vecina Escombreras la instalación de numerosas empresas, entre ellas Enefersa, Asur, Campsa o Butano. Desde esa década los vecinos de Alumbres comenzaron a constituirse en asociaciones para preservar sus derechos y sus condiciones de vida, ya que al encontrarse la población tan próxima a las grandes empresas de productos peligrosos el riesgo hacía que siempre estuvieran en alerta.

  Gracias al trabajo de estos vecinos, entre los años 70' y 80', Alumbres comenzó a mejorar como localidad, apoyada por el Ayuntamiento de Cartagena. En estas dos décadas se instaló el teléfono público, semáforos que regularon el tráfico de camiones que circulaban por el pueblo, vallas protectoras para las carreteras y aceras, alcantarillado, polideportivo, asfalto para las calzadas, consultorio médico... En la actualidad la Diputación cuenta con más de 3.000 habitantes, que siguen intentando mejorar las condiciones de vida en sus casas, parajes y cultivos. Las poblaciones que a comienzos del siglo XXI forman la diputación son: Alumbres, Vista Alegre, El Ferriol, El Porche, Barranco y El Gorguel.