Columna Miliaria de La Tova (Lorca) [La Tova]
Columna Miliaria de La Tova (Lorca)

  Testimonios prehistóricos en La Tova

  En la Diputación de La Tova se produce la confluencia de varios ríos, por un lado el Vélez o Corneros y, por otro, el Luchena, al que a su vez se une el río Turilla, dando origen al río Guadalentín. Los ríos han sido utilizados desde la Prehistoria como vía de comunicación, y en sus márgenes se asentaron los primeros pobladores de esta Diputación, aprovechando las fértiles tierras que los rodean.

  Del período Eneolítico (3000 a.C.) datan algunos de los yacimientos arqueológicos en la zona, como el poblado de Agua Amarga, el poblado de La Gasolinera, La Greda y La Fuensanta. Este último se localiza en el paraje del Balnerio de la Fuensanta, en la margen derecha del río Corneros, y en él se han encontrado restos de una cista junto con otros vestigios cerámicos.

  El paso de la Vía Augusta por la Diputación

  A partir de la época romana cuando se produce un mayor desarrollo de la zona, debido a que la vía Augusta, que unía Carthago Nova con Ad Morum, trazaba parte de su recorrido por el valle del río Corneros, como atestigua el miliario de Diocleciano y Galerio encontrado en el paraje de Los Pimentoneros, que data del siglo IV.

  En el lugar donde fue hallado ha sido colocada una réplica del mismo, conservándose el original en el Museo Arqueológico de Lorca. Establecidas en torno a esta importante vía de comunicación se han localizado algunas villae como las de la Fuensanta, Casa de la Venta I y II y el Cortijo del Centeno. Situadas cercanas al cauce de los ríos, se dedicaban a la agricultura y a la ganadería. Posiblemente de época romana sea el topónimo Puentes, aludiendo a los puentes que permitían cruzar el río Guadalentín y proseguir por la Vía Augusta.