Imagen de cabeza y manos, con cuerpo y devanaderas para vestir. Tamaño menor que el natural.

Se trata de la imagen de la Virgen Dolorosa traspasada por la muerte de su hijo. La espada que le atraviesa el corazón simboliza el dolor desgarrador que esta sintiendo ante la brutal muerte que han dado a Cristo.

La Virgen esta de frente, con los brazos abiertos, suplicando fuerzas al Altísimo para poder soportar tan terrible perdida.

A pesar de estar colocada de forma frontal, podemos observar un leve giro del rostro hacia la derecha. Esto ocurre prácticamente en todas las Dolorosas que siguen el modelo creado por Francisco Salzillo en el siglo XVIII, donde las cabezas están colocadas sobre cuellos nunca estáticos, si no ligeramente movidos a derecha o izquierda.

Esta ataviada con una túnica o vestido de color beige con adornos en plata. Los motivos que engalanan dicha túnica son florales y vegetales, de gran finura.

Por encima de la túnica, un precioso manto de color azul, bordado en tonos dorados. Sobre el manto, una mantilla blanca cae desde la cabeza hacia los hombros, cubriendo parte de los brazos hasta llegar casi a la cintura.

Observaciones

El modelo de Dolorosa aquí representado, es una continuación del que realizó Francisco Salzillo en Murcia y que hoy día se encuentra en el Museo Salzillo.

Este tipo de representación de Virgen con los brazos abiertos ha gozado de mucha popularidad, hasta tal punto que los imagineros de nuestros días continúan copiándolo.

Es más aquellas iglesias donde no es posible una talla en madera, dado la aceptación que esta advocación genera entre el pueblo, lo que  hacen es solicitar una copia en yeso.

Nombre: Dolorosa.

Objeto: Escultura.

Autor: José Lozano Roca.

Fecha: Siglo XX.

Ubicación: Iglesia del Rosario.