Cieza

En el Abrigo de Jorge tan sólo se conservan dos figuras; el largo periodo de tiempo transcurrido, así como su exposición a inclemencias naturales (especialmente contrastes de temperatura), ha contribuido al deterioro de las pinturas, conservándose en buen estado únicamente una de las figuras.

La llamada figura 1, la mejor conservada, representa la silueta de un équido. Su estado de conservación es relativamente bueno, aunque la pintura ha perdido densidad en algunas partes. Tiene unas dimensiones de 27 x 45 cms. y está situada mirando a la izquierda del espectador. Las diferentes partes del cuerpo fueron dibujadas muy proporcionadas y presenta una serie de características técnicas (ausencia de escalón craneal, orejas hacia delante dispuestas en V, ausencia de representación inferior de las extremidades) que llevan a los investigadores a concluir que se trata de una de los pocos ejemplos que en la Región de Murcia se han conservado  del llamado Arte Paleolítico. La figura 2 está peor conservada, siendo prácticamente imposible interpretar los restos de pintura. Si bien la técnica del trazado y del dibujo es la misma que la figura 1, la representación del animal parece diferente, pudiendo ser en esta ocasión un bóvido.

Representaciones parecidas en otras cuevas del Mediterráneo peninsular, como la Cueva del Parpalló en Gandía, confirman que la cronología de esta cueva sería el 15000 a.C, perteneciendo las pinturas al llamado Estilo III del Arte Paleolítico.