La pedanía murciana de Lobosillo se localiza 36 kilómetros al sur de la capital municipal y presenta la peculiaridad geográfica de estar rodeada de poblaciones pertenecientes al campo de Cartagena, como Torre Pacheco, Fuente Álamo y Cartagena.
La historia de esta localidad comenzó tras las repoblaciones del siglo XV, surgiendo como un caserío y pasando a ser considerada, ya desde el siglo XVIII, como una pedanía de Murcia.
A diferencia de otras poblaciones de la misma entidad, cuyos topónimos hacen referencia a los propietarios de los caseríos o parajes originarios, la denominación de Lobosillo deriva de la abundancia de lobos en la zona durante la Edad Media.
La principal fuente económica tradicional ha sido la agricultura, pero con el paso de los años ha ido cobrando importancia el sector servicios, con predominio de las fábricas y comercios de muebles.
Aún conserva el entorno de la pedanía algún huerto de cítricos, explotaciones familiares que tratan de conservar el paisaje propio del conocido como 
campo de Murcia.
Entre los meses de junio y julio, Lobosillo celebra sus fiestas patronales, dedicadas a San Antonio de Padua y a San Pedro Apóstol. Los festejos ofrecen desde espectáculos ecuestres hasta encuentros de artesanía, amenizados con diversidad de actuaciones musicales y la popular romería a la ermita del paraje de Los Ríos.