El tejón es un mamífero carnívoro de la familia de los mustélidos, como las comadrejas, de los de mayor tamaño (longitud de entre 65 y 100 cm y un peso entre 10 y 16 kg), y estructura robusta, que están caracterizados por sus mandíbulas poderosas, dientes carniceros preparados para la trituración y molares anchos y planos con múltiples cúspides.
Su cabeza es triangular y el cuello relativamente corto y grueso, al igual que la cola. Posee un hocico en forma de huso y es muy móvil, empleándolo para la búsqueda de alimentos. Tiene unos ojos pequeños, lo mismo que las orejas las cuales están orientadas hacia los lados y hacia atrás.
El principal rasgo distintivo del tejón es el denso pelaje que cubre todo su cuerpo, de un color pardo grisáceo que se torna negro en las partes inferiores (garganta, vientre) y en las patas. La cara del tejón posee un característico antifaz negro que contrasta sobre el color blanco de la misma.
Es un mamífero semiplantígrado, de patas fuertes y robustas, con cinco dedos en cada una y la planta almohadillada. Tienen unas uñas largas y fuertes que quedan en sus huellas de una forma muy clara.
Hábitat
En España lo podemos encontrar en cualquier hábitat, incluso en el desierto almeriense o en los olivares de Jaén. Pero donde más a gusto se encuentra es en estribaciones montañosas, con cierta cobertura vegetal con robles, encinas, combinados con pastizales amplios donde puede encontrar lombrices de tierra, coleópteros, bulbos, etc. La presencia de ganado (especialmente vacuno) también parece beneficiarle.
Distribución
El tejón encuentra sus mejores poblaciones en las sierras y campos de la mitad septentrional de la Región de Murcia, sobre todo en las sierras del Noroeste, donde existe un mayor número de cursos de agua. También se puede localizar en algunos espacios naturales de la mitad sur como en las Sierras de la Carrasquilla y Almenara en los municipios de Águilas, Lorca y Mazarrón.
Alimentación y costumbres
En líneas generales podemos decir que el tejón es omnívoro y su alimentación depende del lugar donde tenga su hábitat, y según la estación del año.
Es un animal tímido, perezoso, precavido, tranquilo y desconfiado, de costumbres nocturnas, lo que hace muy difícil su observación. Son muy sociales, aunque la existencia o no de grupos depende del tipo de recurso trófico y su distribución y abundancia dentro de los hábitat. Por ejemplo, los tejones de muchas zonas británicas llegan a vivir en grupos de hasta 30 individuos, mientras que en Doñana lo normal son las parejas o, a lo sumo, la pareja y las crías del año.
Les gusta bañarse en el agua y parece inmune a las picaduras de las avispas, abejas y víboras. Su visión es en blanco y negro y los individuos viejos son ciegos pero son capaces de sobrevivir en la naturaleza guiándose de su mejor sentido, el olfato.
Es un animal tremendamente limpio, este dato es muy importante para detectar su presencia. Su nombre científico (meles) viene de miel, y parece que siente gran afición por la miel y por las colmenas, sin miedo alguno a los aguijones de las abejas.