Coco

    En el mercado

    El coco se puede encontrar en el mercado fresco o tras extraer su pulpa madura, de la que se obtendrán productos como el coco rallado y desecado, la leche de coco o su aceite.

    Para adquirir cocos frescos es necesario agitarlos cerca del oído para escuchar y sentir como se mueve en su interior el agua, lo que denotará que no se trata de una pieza seca, pasada. Una vez abierto (generalmente tras ser golpeado con un objeto contundente) debe desprender cierta fragancia dulzona y agradable.

    El coco fresco se conserva en perfectas condiciones para su consumo alrededor de dos meses. Tras abrirlo se utilizará el mismo día, aunque al introducirlo en un recipiente cerrado y con agua se puede ingerir en 4-5 días. No obstante también es posible guardar los trozos de pulpa en el congelador, donde se conservarán hasta 9 meses.

    En la mesa

    En la Región de Murcia existe tradición de degustar cocos frescos en los puestos ambulantes de verbenas y fiestas populares.

    Para tomarlo en casa tan sólo es necesario retirar el agua con cuidado (se puede beber posteriormente), abrir el coco en dos y extraer la pulpa.

    Su textura fina y delicada se une a un peculiar sabor dulce, suave, que hace de este producto un manjar exquisito para postres con fruta variada o como tentempié y aperitivo. Esta pulpa madura también se utiliza tras su rallado y desecado en la elaboración de dulces, alfajores, dulce de leche, natillas, galletas variadas, batidos, cremas, tartas o bizcochos.

    En recetas saladas destaca su utilización en elaboraciones de pescado y en la cocina exótica, añadiéndose al curry, donde suaviza la intensidad de sus guindillas.

    Por otro lado, el agua de coco, de sensaciones dulzonas, es rica en nutrientes e ideal para aplacar la sed, considerándose una bebida isotónica natural. Al igual que la pulpa, también se utiliza en la elaboración de numerosas recetas dulces o saladas.

    Es importante no confundir el agua de coco con la leche de coco, ya que esta última se obtiene tras triturar y exprimir la pulpa y el añadido de agua o leche. Se puede beber como refresco o en batidos de frutas donde destaca el Coco-Loco.