Las habichuelas con hinojo son una receta típica en las pedanía de El Fenazar, donde el hinojo se puede encontrar fácilmente.

Resulta muy económica y de sencilla elaboración.

Por muchos años en la Edad Media se consideró al hinojo como una planta mágica. Como costumbre se colgaba un manojo en la puerta de las casas para asustar a los malos espíritus días antes del solsticio de verano. Se trata de una planta muy aromática, autóctona de la cuenca mediterránea.

De las semillas secas del hinojo se obtiene gran provecho. De ellas se consigue el aceite esencial que se utiliza como especia. Este aceite también combina con tartas, panes y pasteles, curries cuando es molido, y en pescados: caballa, arenque y salmón.