La Torre del Reloj de Pliego

    Arquitectura de la Torre

    En medio de una estructura desigual, queda a la vista tres plantas cuadradas y desiguales en tamaño y en adorno exterior.

    Es esta edificación de Pliego una Torre exenta del s. XIX, en su observación se la ve simple por falta de elementos de adornos llamativos. Pero al contemplar sus líneas rectas, nunca iguales en sus plantas, donde alargan silueta de la Torre o la acortan, es donde se aprecia la labor magnifica del maestro que la construyo.

    Esa desigualdad de tamaños de sus plantas, le da un cierto movimiento, que se ve favorecido con las molduras sencillas, en volado, que las separa.

    Triangular es la base de la edificación que la recoge, y cuadrada es la base que levanta las tres plantas y la estructura de hierro que la culmina.

    Otro Reloj público acompaña a este en Pliego, es el Reloj de Sol, en la Fuente de los Caños. Está labrado y pintado en la cara de un sillar de piedra.

    En este reloj de sol las horas se marcan bajo una representación antropomórfica del sol, su fecha es de 1751.

    Zonas de la Torre

    Una puerta pequeña y sencilla de madera, da paso a la estructura donde esta la Torre del reloj.

    Por ella se accede a una terraza, rodeada de una baranda de hierro, donde están las escaleras que suben hasta otra puerta de las mismas características que la anterior, pero está ya situada en el primer cuerpo de la Torre.

    El segundo cuerpo es el de menor altura, y como única decoración unos vanos cerrados, enmarcados en líneas rectas en sus lados cerrando en curva.

    Es en la tercera planta, donde se encuentra instalado el reloj, de nuevo, vanos cerrados de distintas dimensiones, adornan esta planta.

    Culminando la Torre del Reloj, una estructura cuadrada en base, forjada de hierro, contiene tres campanas en hilada, la primera más grande que las dos que llegan una encima de la otra hasta el pararrayos que protege la edificación.

    No tiene en la actualidad, más cometido, está torre, que el que se le dio en su construcción en el s. XIX, ser objeto público, para dar información de la medida del tiempo.

    Son varias las torres de la Región de Murcia, en las que se utiliza el hierro, como forma de adorno en edificios, en el s. XIX, es una forma de variar la arquitectura con distintos materiales.