Como ocurrió primeramente en Floridablanca y después en Santa Isabel, La Seda se ha unido a los espacios públicos para el uso y disfrute de los murcianos.

Se ha introducido como principal incorporación los caminos transversales que unen los barrios de San Andrés y la Seda.

Cuenta con zonas deportivas, en donde se han instalado aparatos para ejercicios al aire libre, fabricados en maderas talladas, y juegos infantiles para niños de todas las edades.

También destaca el auditorio central como lugar de encuentro de los vecinos, al haberse construido unos bancos de azulejos, que permitirán un mejor aprovechamiento de la magnífica pérgola y el escenario existente.