La Azohía desde la Torre [Torre de la Azohía]
La Azohía desde la Torre

     A causa del fracaso repoblador que se dio tras la incorporación del reino de Murcia a la Corona de Castilla durante la segunda mitad del siglo XIII, el litoral quedó en una peligrosa situación, amenazada por potenciales enemigos que podían provenir del emirato nazarí de Granada, los estados berberiscos del norte de África, e incluso de la vecina Corona de Aragón o de franceses e italianos.

     Solamente Cartagena, reducida a su mínima expresión urbana, refugiada tras sus muros, pugnó por sobrevivir en el contexto costero bajomedieval.

     Así, el panorama que presentaba la marina murciana en el siglo XVI era el de un inmenso desierto humano, si exceptuamos la ciudad portuaria y Mazarrón, que había nacido gracias a una explotación minera en la segunda mitad de la centuria anterior.

     Como muestra de la integración del reino en la política general de la Monarquía, Felipe II envió a sus ingenieros militares a estudiar la construcción de algunas fortificaciones en la costa que protegiesen y controlasen el espacio circundante. Así se construyó la torre de La Azohía, con los planos ideados por el famoso facultativo de origen italiano Juan Bautista Antonelli, que trabajó junto al virrey de Valencia, Vespasiano Gonzaga, en diversas tareas relacionadas con el arte militar.

     Fue perdiendo valor militar ya a comienzos del siglo XIX, hasta que mediada la centuria estuvo vinculada a un puesto de carabineros. Gracias a la restauración emprendida por la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia hacia 1989, esta interesante fortificación pudo ser rescatada de su ruina.