Además de los cinco obispos firmantes de las actas conciliares se tiene constancia de otros dos que ejercieron su cargo en Begastri y que no aparecen en la documentación escrita relacionada con los primeros concilios. El hallazgo en el  yacimiento arqueológico de dos placas epigráficas conmemorativas, nos permite conocer su existencia e incluso tener una imagen fija de algunos actos litúrgicos. Nos referimos claro está al obispo Vitalis y al obispo Acrusminus.

  El obispo Vitalis es citado en una inscripción que ha sido data en el siglo VI. La lápida conmemorativa parece hacer referencia a un tal VITALIS, posiblemente un obispo o alto cargo eclesiástico, que fue enterrado en la basílica de Begastri y cuyas reliquias fueron veneradas por la comunidad religiosa. La lectura más reciente y fiable de la inscripción es la siguiente:

  El otro obispo rescatado del olvido gracias a los hallazgos epigráficos es Acrusminus, del cual sabemos que permaneció en su cargo al menos durante tres años. La inscripción de la lápida hace referencia a la consagración de una basílica bajo la advocación de San Vicente, única conocida hasta ahora. Se ha transcrito de la siguiente manera: "En el nombre del Señor, Acrusmino, obispo de la iglesia de Begastri, consagró esta basílica de San Vicente en el tercer año de su pontificado".

 
[In] NO(mine) DO(mini) " ACRVSMINVS "
BIGASTRENS(is) ECCLESIE EP(i)S(copus)
SACRAVIT ANC BASELICAM
S(an)C(t)I VICENTII ANNO III PONTIFICAVS
SVI
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