El infante don Juan Manuel
El infante don Juan Manuel

Don Juan Manuel

Destacará como un insigne político y militar, participando activamente en la vida del territorio murciano.

Sin embargo sus labores en la corte y en el reino de Murcia no impidieron a don Juan Manuel dedicarse a las letras. De su pluma salieron algunas de las obras más representativas de la lengua española

Desde finales del siglo XIII como en la centuria siguiente, tanto D. Manuel como su hijo D. Juan Manuel, titulares del señorío de Villena, pusieron su empeño en repoblar el extenso territorio de que gozaban para hacer de este una fuente de ingresos a través de sus rentas.

Yecla impulsada por los Manueles

Se incentivó en los nuevos pobladores el cultivo con la entrega de las tierras trabajadas por los musulmanes, así como otras nuevas roturaciones, al igual que se crearían nuevas infraestructuras hidráulicas y, por supuesto, el aprovechamiento de las ya existentes.

Todavía hoy en Yecla se pueden observar algunas de estas obras hidráulicas en el paraje de Los Baños, como el espléndido ejemplo de aljibe cimbrado datado entre los siglos XIII y XIV, o los restos de canalizaciones hidráulicas en la alquería del contiguo paraje de los Torrejones.

Otra medida fundamental se produciría en 1280: D. Manuel concedía a Yecla todos los privilegios y prerrogativas necesarias para constituirse como villa, así como la dotación de funciones para constituir el concejo o ente local, formado por cargos elegidos anualmente por los vecinos, necesario para gobernar la villa.

Por otro lado, las guerras que durante el siglo XIV enfrentaron a Castilla con Aragón, así como los brotes de Peste Negra que solía acompañar en la Edad Media a todas las etapas conflictivas, oscurecen también el propio devenir de Yecla. Este clima de crisis debió dejar su huella sobre la villa de Yecla propiciando una grave recesión demográfica y económica.

No sería hasta el último cuarto de este siglo cuando comience a dar signos de recuperación, algo que irá acompañado por la ubicación y potenciación del puerto seco y aduana de Yecla establecido en este lugar hacia 1351 .En él se pagaban los impuestos de las mercancías que se introducían desde Castilla a Aragón y viceversa.

En cuanto a su condición como villa de señorío en ningún momento sería cuestionada, como tampoco su pertenencia a Castilla, algo que sin embargo si había sucedido con otras poblaciones del señorío de Villena.