Estatua del Augusto Capite Velato hallada en la Curia de Carthago Nova [Carthago Nova]
Estatua del Augusto Capite Velato hallada en la Curia de Carthago Nova


     Se trata de una escultura togada que, por conservar los pliegues ascendentes de la toga a ambos lados del cuello, puede adscribirse al género de las esculturas togadas capitibus velatis. Tiene una altura total conservada de 192 cm, apoyando en un plinto de 10 x 72 x 46 cm. Originariamente, con su correspondiente retrato hoy perdido -cuya altura total, incluidos cuello-testa, podría oscilar alrededor de 30-40 cm- alcanzaría una altura en torno a los 2,30 m, superior, por tanto, a los 2,17 m del Augusto de Via Labicana, uno de sus principales paralelos.

     Labrada en un único bloque prismático de mármol blanco, posiblemente Luni-Carrara, la muñeca y mano izquierdos, el antebrazo diestro y la cabeza velada que eran piezas trabajadas aparte, podrían ser de mármol de Paros, combinación habitual en el ámbito de la escultura romana y, particularmente, en este tipo iconográfico, como pone de manifiesto la mencionada estatua togada de Augusto procedente de Via Labicana. El análisis estilístico parece indicar que se trata de la obra de un artesano local, que repite con fidelidad los modelos urbanos en boga y que bien pudo aprender el trabajo del mármol de la mano de diestros artesanos instalados en la colonia y acaso procedentes de la propia Roma.

     De tamaño mayor al natural, la estatua debió evocar a un personaje de altísima dignidad vestido con túnica ceñida por una amplia toga, característica de los inicios de época Imperial, que porta los calcei patricii, zapato típico de individuos de elevada condición socio-política. Del mismo modo, ciñe en el dedo anular de la mano izquierda un anillo de chatón sin decoración. En su condición de sacerdote sacrificante velato capite, el personaje evocado en la estatua de Cartagena debía empuñar instrumentos de carácter litúrgico: la mano izquierda debía asir un aspergillum o bien un lituus o báculo para los augurios y la diestra un instrumento para libaciones, en concreto, un simpuuium o, más probablemente, una patera. Este tipo de imágenes fue empleado por los primeros emperadores, dentro de su pretensión de afirmar el culto dinástico y la imagen mística, típicamente romana, del imperator y de los miembros de su familia como jefes fieles a los cultos tradicionales de la religio. Igualmente, si bien se trata de un refuerzo tectónico de la estatua, acompaña a ésta en el lado inferior izquierdo un scrinium cilíndrico.

     La ejecución plana y sumaria del dorso evidencia que la visión de la estatua era completamente frontal. En este sentido, debió estar emplazada en un nicho abierto en la pared del fondo de la sala de reuniones de la Curia, donde presidiría las reuniones del Senado local. Adscrita al tipo estatuario B.a. de H.R. Goette y remitiendo desde el punto de vista tipológico, estilístico y conceptual al togado capite velato de Augusto, hallado en la Via Labicana de Roma, se puede datar a inicios del siglo I d.C., en concreto, en época augustea tardía o plena edad tiberiana.

     Lugar de hallazgo, dimensiones, datación y modelo tipológico-iconográfico hacen muy probable la identificación de la togata effigie con una imagen de Augusto Pontifex Maximus. No obstante, no podemos obviar la posibilidad de que la estatua sustentara un retrato velado del emperador Tiberio o bien de algún otro miembro de la casa imperial, en particular alguno de los herederos del primero, como Agrippa, Drusus maior, Drusus minor o Germanicus, si bien tales opciones son menos probables.