Free cookie consent management tool by TermsFeed Historia de La Manga del Mar Menor- Antigüedad - Región de Murcia Digital
HISTORIA

Historia de La Manga del Mar Menor

Antigüedad

 Resto de ánfora romana encontrada en el Mar Menor [San Javier_La Manga]
Resto de ánfora romana encontrada en el Mar Menor

Naves fenicias hundidas en las aguas mangueñas

La civilización íbera encontró idóneas las costas del Mar Menor para asentarse y comerciar con los fenicios, un pueblo venido por mar que traía especias, tejidos, cerámica y vino. Los hallazgos de barcos fenicios hundidos en las costas del Mar Menor indican que este pueblo mantuvo un activo comercio con la población local y que utilizaban el área como lugar de paso.

En El Estacio existe constancia de que fondeaban naves fenicias que surcaron el litoral murciano hace 2.700 años. Esta zona recibe su nombre del griego y significa “sitio abrigado”, ya que las naves siempre han buscado aquí su refugio, aprovechando la estratégica situación que les proporcionaba Isla Grosa, el islote del Farallón y la restinga de arena.

Otros yacimientos submarinos en La Manga son Punta de Pudrimel, los Escolletes del Estacio y el Bajo de la Campana. Este último se encuentra junto a la Isla Grosa y dispone de vestigios de época fenicio-púnica, datados entre los siglos V y IV a.C. Cuenta con variedad de colmillos de elefante que muestran inscripciones fenicias, así como diversos minerales y ánforas.

La gran abundancia de naufragios localizados a lo largo de este litoral está relacionada con las rutas colonizadoras de los pueblos procedentes del Mediterráneo oriental.

Un asentamiento fundamentalmente industrial

A partir del siglo IV a.C. los cartagineses y romanos desarrollaron industrias pesqueras y transportaron en sus naves lingotes de plata, plomo y ánforas con todo tipo de mercancías. El notable tráfico marítimo en esta época era posible gracias a que el Mar Menor se encontraba prácticamente unido al Mediterráneo.

Aprovechando el alto índice de salinidad de las aguas de la laguna, el pueblo romano desarrolló importantes industrias de salazones, signo indicativo de que en esa época la zona era fundamentalmente industrial. Así lo confirman los pecios de San Ferreol, en las cercanías de la Playuela y Punta de Algas, frente al límite Norte de La Manga del Mar Menor.